Momentos de tensión se vivieron en el Estadio Miguel Alemán Valdés de Celaya, Guanajuato, luego de que un guardia de seguridad privada apuntara con una pistola de hidrogel, confundida inicialmente con un arma de fuego, a un grupo de aficionados al finalizar el partido de cuartos de final de la Liga de Expansión MX contra Tampico Madero. El encuentro terminó con un empate 0-0, pero el marcador global de 1-0 favoreció a Tampico, dejando al Celaya eliminado del torneo Clausura 2025.
El incidente comenzó cuando un reportero que cubría el partido tuvo un altercado con elementos de seguridad privada. Algunos aficionados, al percatarse de la discusión, comenzaron a insultar y lanzar objetos hacia el personal de seguridad, defendiendo al periodista. La situación escaló rápidamente, lo que llevó a un guardia, vestido con uniforme café, a sacar lo que parecía ser un arma de fuego, generando pánico entre los presentes.
Videos que circularon en redes sociales captaron el momento en que el guardia apuntaba hacia la tribuna, mientras los aficionados respondían con más agresiones verbales y lanzamiento de objetos. La tensión llegó a tal punto que un grupo de aproximadamente 15 seguidores del Celaya invadió la cancha, persiguiendo a los guardias. Uno de los elementos de seguridad fue alcanzado, golpeado con patadas y hasta con una silla.
La directiva del Club Celaya emitió un comunicado aclarando que el objeto utilizado por el guardia no era un arma de fuego, sino una pistola de hidrogel, un juguete que dispara bolas de gel. Según el club, el elemento de seguridad actuó de manera indebida al intentar controlar la situación con este objeto, lo que provocó una reacción violenta de los aficionados. La directiva condenó el comportamiento del guardia y anunció que será sancionado.
La Liga de Expansión MX también se pronunció sobre los hechos, reprobando los actos de violencia en el estadio. La Comisión Disciplinaria de la Federación Mexicana de Futbol inició una investigación para determinar las responsabilidades y posibles sanciones, que podrían incluir multas económicas, veto del estadio o castigos deportivos para el Club Celaya.
A pesar de la gravedad del incidente, no se reportaron heridos graves ni disparos. Sin embargo, las imágenes de aficionados invadiendo la cancha y agrediendo al personal de seguridad han generado indignación entre los seguidores del futbol mexicano, quienes exigen medidas más estrictas para garantizar la seguridad en los estadios.
Este episodio se suma a otros casos de violencia en el futbol mexicano, particularmente en la Liga de Expansión, donde las tensiones entre aficionados y personal de seguridad han sido recurrentes. La eliminación del Celaya, un equipo con una afición apasionada, parece haber sido el detonante de este nuevo capítulo de desmanes en el balompié nacional.
La directiva del Celaya reiteró su compromiso con la seguridad de los aficionados y prometió colaborar con las autoridades para esclarecer los hechos. Mientras tanto, la investigación sigue su curso, y se espera que en los próximos días se anuncien las sanciones correspondientes para evitar que incidentes como este se repitan en el futuro.