Cientos de familias regiomontanas se dieron cita este domingo en el Parque Fundidora para disfrutar del último día de las vacaciones de Semana de Pascua. Niños y niñas llenaron de risas y juegos las áreas verdes, convirtiendo el emblemático parque en un espacio de diversión y convivencia familiar.
El clima soleado acompañó a los visitantes, quienes aprovecharon para pasear en bicicleta, patinar o simplemente relajarse en el césped. Las áreas de juegos infantiles lucieron abarrotadas, con pequeños disfrutando de columpios y resbaladillas, mientras los padres compartían momentos de esparcimiento.
En el corazón del parque, los vendedores ambulantes ofrecieron una variedad de antojitos, desde elotes hasta algodones de azúcar, que hicieron las delicias de chicos y grandes. Algunas familias optaron por organizar picnics improvisados, extendiendo mantas bajo la sombra de los árboles.
Mientras tanto, en San Pedro Garza García, el evento San Pedro de Pinta reunió a miles de personas en las calzadas Del Valle y San Pedro. Este tradicional espacio dominical, que lleva años promoviendo la convivencia, cerró el periodo vacacional con una alta afluencia de visitantes.
Niños en San Pedro de Pinta se divirtieron con actividades al aire libre, desde paseos en bicicleta hasta juegos con sus mascotas. La atmósfera festiva permitió a las familias despedir las vacaciones con energía y alegría, aprovechando el cierre de circulación vehicular en estas avenidas.
El evento, que se ha consolidado como un punto de encuentro en el municipio sampetrino, también ofreció espacios para emprendedores locales. Productos artesanales y amigables con el medio ambiente estuvieron a la venta, atrayendo la atención de los asistentes.
En ambos lugares, Parque Fundidora y San Pedro de Pinta, la seguridad fue una prioridad. Autoridades locales resguardaron los eventos para garantizar que las familias disfrutaran sin contratiempos, lo que permitió un ambiente tranquilo y relajado.
Para muchos, este domingo marcó el fin de un merecido descanso tras la Semana Santa y de Pascua. Con el regreso a clases y actividades laborales a la vista, las infancias regiomontanas exprimieron al máximo su último día de libertad en estos icónicos espacios.
La alta participación en ambos eventos refleja el cariño de los regiomontanos por sus áreas recreativas. Parque Fundidora y San Pedro de Pinta se mantienen como referentes de esparcimiento, uniendo a la comunidad en momentos de diversión y relajación.
A medida que el sol se ocultaba, las familias comenzaron a despedirse de estos espacios, llevando consigo recuerdos de un día lleno de sonrisas. El cierre de las vacaciones dejó un sabor agridulce, pero con la promesa de volver a estos lugares que son emblemas de Monterrey y San Pedro.