La Bolsa de Nueva York abrió con fuertes subidas este miércoles, impulsada por un inesperado mensaje conciliador del presidente Donald Trump. El índice Nasdaq, centrado en tecnología, escaló un impresionante 3.47 por ciento, alcanzando los 16,866 puntos. Este repunte se produce después de días de incertidumbre en los mercados financieros.
El Dow Jones de Industriales no se quedó atrás, registrando un avance del 2.21 por ciento, situándose en 40,052 puntos. Por su parte, el S&P 500, que abarca a las principales empresas estadounidenses, ganó un 2.64 por ciento, llegando a las 5,427 unidades. Estas cifras reflejan un alivio generalizado entre los inversionistas.
El motivo detrás de este entusiasmo bursátil es la reciente declaración de Trump, quien aseguró que no tiene planes de destituir a Jerome Powell, presidente de la Reserva Federal. Esta afirmación contrasta con sus críticas previas, donde presionaba a Powell para que redujera las tasas de interés de inmediato.
La semana pasada, las declaraciones de Trump generaron nerviosismo en Wall Street. El mandatario había sugerido que Powell debería ser despedido si no actuaba rápidamente para estimular la economía. Como resultado, los principales índices bursátiles cayeron más del 3 por ciento el lunes, y el dólar tocó mínimos no vistos desde 2021.
Sin embargo, el martes por la noche, Trump suavizó su tono. En un evento público, afirmó que no busca remover a Powell, cuyo mandato como presidente de la Reserva Federal se extiende hasta mayo de 2026. También expresó su deseo de que Powell sea más proactivo en la reducción de las tasas de interés.
Otro factor que impulsó los mercados fue el anuncio de la Casa Blanca sobre un posible acuerdo con China. Trump indicó que los aranceles impuestos a las importaciones chinas, que alcanzan el 145 por ciento, podrían reducirse sustancialmente. Esta noticia generó optimismo sobre una desescalada en las tensiones comerciales.
El cambio de postura de Trump también tuvo un impacto positivo en el dólar, que comenzó a recuperarse tras días de caídas. Los bonos del Tesoro a 10 años, que habían subido al 4.38 por ciento, mostraron signos de estabilización, lo que calmó a los inversionistas preocupados por la deuda estadounidense.
A pesar de este repunte, algunos analistas advierten que la incertidumbre persiste. La posibilidad de que Trump presione a la Reserva Federal para adoptar políticas más laxas sigue siendo un riesgo. La independencia del banco central, considerada un pilar de la estabilidad económica, continúa en el centro del debate.
Mientras tanto, empresas como GE Aerospace y Tesla registraron ganancias significativas, con alzas del 6 por ciento y 4.7 por ciento, respectivamente. Estas cifras reflejan el impulso general del mercado, aunque algunas compañías, como Northrop Grumman, enfrentaron caídas notables.
El panorama económico sigue siendo complejo, pero por ahora, los mercados celebran la moderación en el discurso de Trump. Los inversionistas esperan que las negociaciones con China y la estabilidad en la Reserva Federal mantengan el impulso positivo en Wall Street.