El futbolista francés Dimitri Payet, estrella del Vasco da Gama, enfrenta graves acusaciones por violencia física, psicológica y sexual. La denuncia, presentada por la abogada brasileña Larissa Ferrari, de 28 años, detalla un supuesto patrón de abusos durante una relación extraconjugal que habría durado desde agosto de 2024 hasta marzo de 2025.
Ferrari asegura que Payet la manipuló emocionalmente, aprovechándose de su vulnerabilidad psicológica. Según la denunciante, el jugador le exigía realizar actos degradantes, como beber su propia orina, lamer el suelo o grabar videos humillantes. Estas acciones, descritas como “pruebas de amor”, habrían sido usadas para ejercer control sobre ella.
La relación comenzó a través de Instagram, cuando Payet contactó a Ferrari y rápidamente iniciaron encuentros presenciales. La abogada, originaria de Paraná, viajaba frecuentemente a Río de Janeiro para visitar al futbolista. Sin embargo, lo que empezó como una relación consensual se tornó en un escenario de agresiones, según la denuncia.
Ferrari presentó pruebas de lesiones físicas, como hematomas en piernas, glúteos y brazos, respaldadas por un examen forense realizado en Paraná. También solicitó una medida de protección contra Payet, quien aún no ha respondido públicamente a las acusaciones. La policía de Río de Janeiro investiga el caso bajo estricta confidencialidad.
El club Vasco da Gama, donde Payet juega desde 2023, ha evitado pronunciarse sobre el tema. La falta de respuesta del equipo ha generado críticas entre los aficionados, quienes exigen claridad sobre la situación de una de sus principales figuras.
Payet, de 38 años, es un exintegrante de la selección francesa y llegó a Brasil tras una destacada carrera en el Olympique de Marsella. Casado desde hace 18 años y padre de cuatro hijos, su vida personal ahora está bajo escrutinio tras estas acusaciones que han conmocionado al fútbol brasileño.
Ludivine Payet, esposa del futbolista, apareció recientemente en Río de Janeiro, poco después de que las denuncias se hicieran públicas. Su presencia ha avivado los rumores sobre el impacto de este escándalo en la familia del jugador, aunque no ha emitido comentarios al respecto.
Ferrari, por su parte, ha declarado que decidió hacer pública su denuncia para apoyar a otras mujeres que puedan estar en situaciones similares. Actualmente, la abogada recibe tratamiento psicológico y psiquiátrico para lidiar con las secuelas de los presuntos abusos.
El caso ha generado un intenso debate en Brasil sobre la violencia de género en el ámbito deportivo. Mientras la investigación avanza, la reputación de Payet, tanto dentro como fuera de la cancha, enfrenta un momento crítico que podría definir su futuro en el fútbol.