La policía de Londres arrestó a seis activistas de Greenpeace tras una protesta en la que vertieron 300 litros de tinte rojo en un estanque frente a la embajada de Estados Unidos.
La acción buscaba denunciar la venta de armas de Estados Unidos a Israel, según la organización, que señaló que el tinte era no tóxico y biodegradable.
Entre los detenidos está Will McCallum, codirector ejecutivo de Greenpeace Reino Unido, acusado de daño criminal y conspiración para causar daño criminal.
Las autoridades confirmaron que no hubo violación del perímetro de seguridad de la embajada, ya que el estanque es de acceso público.
Greenpeace afirmó que la protesta pretendía visibilizar las consecuencias del conflicto en Gaza, utilizando contenedores con la frase “Para de armar a Israel”.