En un nuevo tropiezo para el régimen, el Senado rechazó la lista de candidatos a magistrados electorales para 30 estados. Todo porque no alcanzaron la mayoría calificada que tanto ansiaban.
Fueron 112 votos en total: 72 a favor, 38 en contra y 2 abstenciones. Pero la 4T necesitaba 75 para cantar victoria, y esta vez no lo consiguió.
La oposición no se quedó callada y acusó que muchos de esos candidatos eran cercanos a Morena. Un intento descarado, dicen, de controlar los tribunales electorales a su favor.
Ahora, la Junta de Coordinación Política, dominada por la 4T, tendrá que volver a la mesa y armar otra propuesta. ¿Quiénes faltaron en la coalición oficial para dejarlos en ridículo?
Esto huele a rebelión interna o a simple ineptitud. El tiempo dirá si logran alinear a sus huestes para la próxima jugada.