A partir del 7 de abril de 2025, las cafeterías en Países Bajos darán un giro inesperado: empezarán a vender marihuana cultivada de manera legal como parte de un ambicioso experimento. Este proyecto, que lleva años en desarrollo, busca regular el suministro de cannabis y probar un modelo diferente al tradicional mercado de los coffeeshops.
El plan se centra en 10 ciudades seleccionadas, donde 75 cafeterías podrán ofrecer exclusivamente cannabis producido por cultivadores autorizados. Durante esta fase final del “Experimento de Cadena Cerrada”, se dejará atrás la venta de marihuana de origen ilegal, marcando un cambio radical en la política de tolerancia del país.
La idea es sencilla pero innovadora: controlar la calidad del producto, reducir el crimen asociado al tráfico ilegal y evaluar si este sistema puede funcionar a gran escala. Los cultivadores, como Hollandse Hoogtes, ya están listos con variedades como Gelato 41, que prometen atraer a los consumidores habituales.
Este experimento no solo pone a Países Bajos en el radar mundial, sino que también podría inspirar a otros países a repensar sus leyes sobre el cannabis. Durante al menos cuatro años, las autoridades analizarán los resultados para decidir si este modelo se expande o se ajusta.
Para los amantes del estilo de vida alternativo, este paso representa una evolución emocionante. La marihuana legal en las cafeterías no solo será un producto regulado, sino también una experiencia que combina tradición con modernidad en un país conocido por su enfoque progresista.