Estados Unidos ha tomado una postura firme en el conflicto de Gaza, alineándose completamente con Israel. En un discurso ante el Consejo de Seguridad de la ONU, la representante interina Dorothy Shea exigió al secretario general António Guterres que deje de lado sus llamamientos a un alto al fuego entre las partes involucradas.
La solicitud de EE.UU. busca que Guterres enfoque sus esfuerzos en presionar a Hamás para que libere a los rehenes aún en su poder. Según Shea, los pedidos de cese al fuego muestran una “equivalencia contraproducente” que no refleja la postura estadounidense ni israelí en el conflicto.
Este pronunciamiento llega en un momento de tensiones diplomáticas. Guterres no ha mantenido contacto con el presidente Donald Trump desde su reelección en noviembre, ni con el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu, quien no responde sus llamadas desde octubre de 2023.
La posición de EE.UU. subraya su apoyo incondicional a Israel, mientras el conflicto en Gaza sigue generando debate internacional. La exigencia pone en evidencia las diferencias entre Washington y la ONU sobre cómo abordar la situación en la región.