La Secretaría de Educación Pública comenzó este mes la aplicación de la Prueba PISA, un examen internacional que evalúa a estudiantes de 15 años en todo el país. Este año, cerca de 8 mil alumnos de 321 escuelas públicas y privadas participarán en la evaluación.
El objetivo de la prueba, coordinada por la OCDE, es medir conocimientos y habilidades en lectura, matemáticas y ciencias. En esta edición, también se incluirá una evaluación de habilidades digitales, un aspecto nuevo que busca reflejar las demandas actuales.
La aplicación se extenderá durante abril y mayo, abarcando las 32 entidades federativas. El Centro Nacional de Evaluación para la Educación Superior será el encargado de llevar a cabo este proceso en secundarias y bachilleratos, tanto en zonas urbanas como rurales.
Mario Delgado, titular de la SEP, destacó que participarán diversos tipos de escuelas, desde telesecundarias hasta centros para trabajadores. Esto busca ofrecer un panorama amplio del nivel educativo en México, aunque reconoció las limitaciones de este tipo de exámenes.
La Prueba PISA se realiza cada cuatro años y permite comparar el desempeño educativo entre países. México, como miembro de la OCDE, ha participado desde el año 2000, y los resultados suelen ser un referente para ajustar políticas educativas.