El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, anunció que este jueves partirá un avión rumbo a México con la misión de repatriar a aproximadamente 300 migrantes venezolanos. La declaración se dio durante un acto transmitido por el canal estatal Venezolana de Televisión, donde destacó que la mayoría de los beneficiados serán mujeres y niños.
Según Maduro, esta operación busca “rescatar” a quienes lograron cruzar la frontera hacia México tras enfrentar lo que describió como “persecución”. El mandatario no ofreció detalles específicos sobre las circunstancias de estos migrantes, pero enfatizó que su gobierno está comprometido con su retorno al país.
El líder venezolano también instruyó a Jorge Rodríguez, jefe negociador del oficialismo, a coordinar con enlaces en Estados Unidos para facilitar más repatriaciones. Aseguró que los migrantes que lleguen serán atendidos, aunque aquellos con deudas pendientes con la justicia venezolana enfrentarán procesos legales bajo lo que llamó “su juez natural”.
Maduro aprovechó para criticar a Estados Unidos, acusándolo de deportar venezolanos “sin juicio” a El Salvador, país que calificó como una “colonia” de Washington. Según él, estas acciones forman parte de una estrategia que incluye “desapariciones forzadas”, aunque no presentó pruebas de dichas afirmaciones.
Este anuncio se enmarca en el “Plan Vuelta a la Patria”, una iniciativa del gobierno venezolano para promover el regreso de sus ciudadanos desde distintos países. La operación refleja las tensiones migratorias en la región y las políticas de repatriación impulsadas por Caracas en medio de una crisis humanitaria que ha desplazado a millones de venezolanos.