En el Centro Histórico de Irapuato, la tensión crece entre los comerciantes establecidos y los vendedores semifijos. Erika Delia Razo Soria, presidenta de la Asociación de Comerciantes Colonos, ha denunciado una ola de agresiones que afecta a dueñas y empleadas de los negocios fijos en los portales Libertad y Carranza.
Todo comenzó cuando los comerciantes formales pidieron al municipio regularizar a los puestos semifijos que, según ellos, operan sin control. Sin embargo, esta solicitud desató una respuesta violenta. Los vendedores ambulantes, aseguran, han recurrido a amenazas y hasta presunto acoso sexual contra las mujeres que trabajan en los locales establecidos.
La situación se agrava en temporada de lluvias, cuando los comerciantes semifijos se instalan frente a los negocios fijos, bloqueando entradas con carritos, bancos y hasta cilindros de gas. Esto no solo afecta las ventas, sino que ha generado enfrentamientos directos, dejando a las trabajadoras en un estado de constante temor.
Erika Razo ha señalado que, a pesar de presentar denuncias con videos y fotos, la respuesta de las autoridades ha sido insuficiente. La policía ha intervenido en algunos casos, pero las soluciones propuestas, como mesas de diálogo con los agresores, han sido calificadas como absurdas por las afectadas.
El director de Servicios Públicos, Rogelio Pérez Espinoza, admite que han recibido los reportes, pero asegura que los temas más graves, como el acoso, deben ser tratados por la Fiscalía. Mientras tanto, los comerciantes sienten que la Dirección de Mercados no aplica el reglamento con firmeza, permitiendo que las irregularidades persistan.
La alcaldesa Lorena Alfaro García ha respondido que el coordinador del Centro Histórico, Alejandro Miranda Guzmán, está atendiendo el problema. Sin embargo, las comerciantes consideran que estas palabras no se traducen en acciones concretas para protegerlas.
Entre las propuestas municipales está la capacitación a través del Instituto de la Mujer Irapuatense y la integración de los negocios al programa Círculo Violeta. Sin embargo, las afectadas insisten en que la prioridad debe ser sancionar a los responsables y poner orden en los portales.
La Asociación de Comerciantes ha enviado un documento formal a la presidenta municipal exigiendo soluciones. Mientras tanto, las mujeres de los portales Libertad y Carranza trabajan con miedo, esperando que las autoridades tomen medidas antes de que la situación escale aún más.
Esta problemática refleja un desafío mayor en Irapuato: la convivencia entre comercio formal e informal en el Centro Histórico. La falta de regulación clara y la lentitud en la respuesta municipal mantienen a las comerciantes en una lucha diaria por su seguridad y su derecho a trabajar en paz.

Imagen generada por IA con fines informativos o representativos. Digital Plural se deslinda de cualquier uso o interpretación.
Comerciantes de Irapuato enfrentan amenazas y acoso en el corazón de la ciudad
Compartir: