El gobierno mexicano ha recibido a 56 mil 298 connacionales deportados desde que Donald Trump asumió la presidencia de Estados Unidos el 20 de enero, según informó Félix Arturo Medina, subsecretario de Gobernación. Esta cifra, parte del programa México te Abraza, revela la magnitud de las políticas migratorias del vecino del norte.
Medina destacó que el objetivo es atender las necesidades de los repatriados y garantizar sus derechos humanos. Sin embargo, la estrategia gubernamental parece desbordada ante el creciente número de personas que regresan al país, con un aumento del 67.6 por ciento desde mayo pasado.
El programa cuenta con el respaldo de 34 dependencias federales y el sector empresarial, pero las críticas no se hacen esperar. La capacidad de respuesta del gobierno de Claudia Sheinbaum enfrenta cuestionamientos, especialmente por la falta de soluciones a largo plazo para reintegrar a los repatriados.
Diez centros de atención, ubicados en estados fronterizos como Baja California, Chihuahua y Tamaulipas, tienen capacidad para atender a 25 mil personas simultáneamente. De los repatriados, 24 mil 82 han ingresado a estos centros, mientras que 12 mil 183 llegaron por vía aérea, principalmente al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles.
Quienes no acuden a los centros reciben una carta de repatriación, alimentos, acceso a llamadas telefónicas, orientación jurídica y boletos de autobús. Sin embargo, estas medidas son vistas como insuficientes frente a la magnitud del problema, dejando a muchos repatriados en una situación de vulnerabilidad.
Más de 92 mil raciones de alimento, 9 mil 786 atenciones médicas y 4 mil 19 consultas psicológicas han sido proporcionadas. Además, 19 mil 282 personas recibieron la Tarjeta Bienestar Paisano con 2 mil pesos para traslados, y 34 mil 918 se afiliaron al IMSS por razones humanitarias.
El panorama económico también genera preocupación. Las remesas, que representan casi el 4 por ciento del PIB mexicano, podrían verse afectadas por la propuesta de Trump de imponer un impuesto del 5 por ciento, violando tratados bilaterales. Esto agrava la incertidumbre para millones de familias mexicanas.
La presidenta Claudia Sheinbaum se reunirá con Trump en la cumbre del G7, donde prometió defender a los mexicanos. Sin embargo, las promesas del gobierno contrastan con la realidad de miles de repatriados que luchan por reinsertarse en un país con retos económicos y sociales crecientes.
La reubicación de dos centros de atención a Tapachula y Villahermosa busca mejorar la respuesta, pero las críticas persisten. La estrategia México te Abraza, aunque ambiciosa, parece insuficiente para enfrentar una crisis migratoria que no da tregua.
Mientras el gobierno presume avances, la sociedad mexicana observa con preocupación cómo se gestiona esta ola de repatriaciones. La reintegración de los connacionales sigue siendo un desafío monumental para la administración actual.

Imagen generada por IA con fines informativos o representativos. Digital Plural se deslinda de cualquier uso o interpretación.
México enfrenta una ola masiva de repatriaciones desde Estados Unidos
Compartir: