La Selección Mexicana arrancó su camino en la Copa Oro 2025 con un triunfo agónico de 3-2 frente a República Dominicana, pero el desempeño dejó más dudas que certezas entre los aficionados. El encuentro, disputado en el SoFi Stadium de Los Ángeles, marcó el inicio del torneo para el Tri, que llegaba como campeón defensor tras su victoria en 2023.
Bajo la dirección de Javier Aguirre, México mostró un arranque prometedor con un gol de Edson Álvarez al minuto 43, quien aprovechó un balón suelto en el área para abrir el marcador. La afición, que llenó las gradas con más de 50 mil asistentes, celebró la ventaja inicial, pero las cosas no serían tan sencillas.
Apenas iniciado el segundo tiempo, Raúl Jiménez amplió la ventaja al 47 con una definición precisa, alcanzando así 40 goles con la selección y acercándose al récord histórico de Javier Hernández. Sin embargo, la alegría duró poco, pues República Dominicana respondió con un tanto de Peter Federico, acortando distancias y poniendo nerviosa a la defensa mexicana.
El Tri parecía recuperar el control con un gol de César Montes, quien remató de cabeza tras un tiro de esquina. Pero la sorpresa llegó cuando Edison Azcona, de República Dominicana, anotó el 3-2 en los minutos finales, desatando la preocupación en las gradas y en el banquillo mexicano.
A pesar de contar con jugadores clave como Luis Malagón, Jorge Sánchez y Orbelín Pineda, México mostró fallas defensivas y falta de cohesión en el mediocampo. Las transiciones rápidas de los dominicanos expusieron las debilidades de una zaga que aún no encuentra su mejor versión bajo el mando de Aguirre.
República Dominicana, en su debut histórico en la Copa Oro, demostró que no será un rival fácil en el torneo. Su presión alta y valentía para ir al frente complicaron a un México que, aunque favorito en el Grupo A, no logró imponer su jerarquía como se esperaba.
La afición expresó su descontento con abucheos al final del partido, reflejando la frustración por un desempeño que dista mucho de las expectativas rumbo al Mundial 2026, donde México será coanfitrión. Las redes sociales se llenaron de críticas hacia el planteamiento táctico y la falta de intensidad del equipo.
El próximo desafío para el Tri será contra Surinam el 18 de junio, un partido que se antoja crucial para recuperar la confianza. Con Costa Rica, dirigida por Miguel Herrera, como el rival más fuerte del grupo, México no puede permitirse más tropiezos si quiere avanzar con solidez.
Este debut deja un sabor agridulce para los seguidores mexicanos, que esperaban una actuación dominante. La presión ahora recae en Aguirre y sus jugadores para demostrar que este resultado es solo un traspié en el camino hacia el título de la Copa Oro.