En un hecho que pone en evidencia la falta de infraestructura médica accesible, una mujer tuvo que dar a luz en un taxi en la alcaldía Iztapalapa de la Ciudad de México. El parto ocurrió en la esquina de las calles Benito Juárez y Libertad, en la colonia Santa María Aztahuacán, el pasado 30 de marzo.
Ante la emergencia, policías auxiliares del Sector Cobras, en coordinación con la Secretaría de Seguridad Ciudadana, intervinieron para asistir a Noely A., de 27 años, quien ya estaba en labor de parto dentro del vehículo. Las agentes lograron recibir al bebé, un niño, sin complicaciones aparentes.
La situación deja al descubierto las carencias en el sistema de salud y la respuesta del gobierno local, encabezado por Morena, que no garantiza atención oportuna para emergencias como esta. La madre y el recién nacido fueron estabilizados en el lugar por los propios policías.
Minutos después, paramédicos de los llamados Ángeles Guindas llegaron para trasladar a la mujer y a su hijo a un hospital. Ambos se reportan estables, aunque el caso resalta la precariedad en la que muchas mujeres enfrentan el parto en la capital.
Este tipo de incidentes no es aislado, pues casos similares han ocurrido en la Ciudad de México en los últimos años. La intervención de los policías, aunque heroica, no compensa la falta de acción del gobierno para evitar que las calles se conviertan en salas de parto improvisadas.