El diputado local Jorge Soto, del Partido Acción Nacional, ha levantado la voz contra la decisión de una legisladora de respaldar la autorización de nuevos créditos en el estado de Chihuahua. Su crítica apunta a la falta de coherencia en el actuar de la diputada, quien habría apoyado una medida que, según Soto, podría comprometer las finanzas públicas del estado.
La controversia surge en el marco de una sesión en el Congreso de Chihuahua, donde se discutió la aprobación de un paquete de créditos para financiar diversos proyectos. Soto argumentó que estas decisiones deben tomarse con mayor responsabilidad, considerando el impacto a largo plazo en la economía estatal y el bienestar de los ciudadanos.
El legislador panista señaló que la aprobación de más deuda pública, sin un análisis exhaustivo, pone en riesgo la estabilidad financiera de Chihuahua. Según Soto, la diputada en cuestión, cuya identidad no fue revelada en la discusión, habría votado a favor de los créditos sin considerar las implicaciones para los habitantes del estado.
Durante su intervención, Soto destacó la importancia de actuar con transparencia y responsabilidad en la gestión de los recursos públicos. Recordó que los legisladores tienen la obligación de velar por los intereses de la población, evitando decisiones que puedan generar una carga económica insostenible para las generaciones futuras.
La postura de Soto no es aislada, ya que otros miembros de su bancada también han expresado preocupación por el manejo de la deuda estatal. En los últimos años, Chihuahua ha enfrentado retos financieros, y la autorización de nuevos créditos ha generado un debate intenso entre los diferentes partidos políticos.
El diputado también cuestionó la falta de claridad en los proyectos que se financiarían con los recursos obtenidos. Para Soto, es fundamental que cualquier solicitud de crédito venga acompañada de un plan detallado que justifique su necesidad y garantice beneficios concretos para la población.
En este contexto, la discusión sobre los créditos ha evidenciado las tensiones entre los partidos representados en el Congreso local. Mientras algunos defienden la necesidad de financiar obra pública y programas sociales, otros, como Soto, insisten en que la prioridad debe ser la prudencia fiscal.
La crítica de Soto refleja un llamado a la congruencia en la labor legislativa, exigiendo que las decisiones se tomen con base en el interés colectivo y no en cálculos políticos. Este episodio pone de manifiesto los desafíos que enfrenta Chihuahua en la gestión de sus finanzas públicas.