El municipio de San Pedro Garza García, bajo el liderazgo del alcalde Mauricio Fernández, está a punto de dar un paso significativo para mejorar la movilidad en la zona metropolitana de Nuevo León. A partir de julio, se iniciarán las obras de la interconexión vial que unirá la avenida Lázaro Cárdenas con Morones Prieto y Gonzalitos, un proyecto que busca aliviar el congestionamiento vehicular que afecta a miles de automovilistas diariamente.
Este ambicioso plan, que cuenta con el respaldo del municipio de Monterrey y el gobierno estatal, tiene como objetivo principal facilitar el tránsito entre ambos municipios. La primera etapa de la obra, que conectará Lázaro Cárdenas con Morones Prieto, se espera que beneficie a más de 50 mil conductores al día, según afirmaron Fernández y el alcalde de Monterrey, Adrián de la Garza.
El proyecto, con un costo estimado de mil 200 millones de pesos, ya cuenta con una inversión inicial asegurada. San Pedro aportará 300 millones de pesos, mientras que la Fundación Montemayor contribuirá con otros 300 millones. Este financiamiento permitirá el arranque de la primera fase, que incluye la construcción de un viaducto con dos carriles por sentido en la zona de Gómez Morín.
El gobierno estatal, encabezado por Samuel García, también se ha sumado al esfuerzo con una inversión de 200 millones de pesos, distribuidos en 100 millones para 2025 y otros 100 millones en 2026. Esta colaboración tripartita refleja un compromiso conjunto para abordar los problemas de movilidad que han aquejado a la región durante años.
La construcción de esta interconexión no solo busca mejorar el flujo vehicular, sino también optimizar la conectividad entre San Pedro y Monterrey. Se contempla que las obras, que tendrán una duración aproximada de un año y medio, concluyan a finales de 2026, transformando la experiencia de movilidad en la zona metropolitana.
El proyecto incluye la prolongación de Lázaro Cárdenas y conexiones con la avenida San Francisco, desde la calle Río Tamoín. Estas modificaciones prometen reducir significativamente los tiempos de traslado, especialmente para quienes viajan entre ambos municipios, una necesidad que ha sido señalada como urgente por los ciudadanos.
A pesar del entusiasmo de las autoridades, el proyecto no está exento de críticas. Vecinos de la colonia Independencia en Monterrey han expresado su preocupación por posibles afectaciones a sus comunidades. Sin embargo, Adrián de la Garza ha asegurado que las obras no impactarán negativamente a los residentes y que se han tomado medidas para minimizar cualquier inconveniente.
Mauricio Fernández, por su parte, ha defendido la relevancia de esta iniciativa, destacando que los beneficios para la zona metropolitana superan las inconformidades de un pequeño grupo. El alcalde ha subrayado que el proyecto es una prioridad que lleva años en planeación y que ahora, con el respaldo financiero y político, está listo para hacerse realidad.
La licitación pública nacional para esta obra se lanzará en los próximos días, con un fallo previsto para julio. Esto permitirá que la construcción comience a finales de ese mes, marcando el inicio de una transformación vial que busca modernizar la infraestructura de la región.
Con este proyecto, San Pedro y Monterrey dan un paso hacia adelante en la búsqueda de una movilidad más eficiente. Las autoridades confían en que esta interconexión no solo aliviará el tráfico, sino que también fortalecerá la integración urbana entre ambos municipios, beneficiando a miles de ciudadanos en su día a día.