El secretario de Salud de Estados Unidos, Robert F. Kennedy Jr., ha tomado una decisión sin precedentes al destituir a los 17 miembros del Comité Asesor sobre Prácticas de Inmunización (ACIP) de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC). Este organismo es clave para definir qué vacunas se incluyen en el calendario nacional, influyendo directamente en las políticas de salud pública del país.
La medida, anunciada mediante un comunicado del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS), marca la primera vez que se reemplaza a todo el comité antes de que finalicen sus periodos. Kennedy, conocido por su postura crítica hacia las vacunas, justificó su decisión argumentando que los miembros actuales tenían conflictos de interés que comprometían la transparencia en las recomendaciones sobre inmunización.
El ACIP, integrado por pediatras, epidemiólogos, inmunólogos y otros expertos en salud pública, había sido renovado en gran parte durante la administración de Joe Biden, con 13 de sus 17 miembros nombrados en 2024. La destitución masiva ha generado controversia, ya que el comité es reconocido mundialmente por su rigor científico y su papel en la lucha contra enfermedades prevenibles por vacunación.
Kennedy, quien asumió el cargo de secretario de Salud en 2025, argumentó que mantener a los miembros actuales habría limitado la capacidad de la administración de Donald Trump para designar un nuevo panel hasta 2028. En un artículo de opinión publicado en el Wall Street Journal, el funcionario insistió en que la medida busca garantizar una mayor transparencia en las políticas de vacunación.
Críticos de la decisión han calificado la acción como una maniobra política que pone en riesgo la credibilidad científica del CDC. Expertos en salud pública han advertido que destituir a un comité de esta relevancia podría generar incertidumbre en las políticas de inmunización, especialmente en un momento en que enfermedades como el sarampión han resurgido en algunas regiones.
La destitución ocurre en un contexto de cambios recientes en las recomendaciones de vacunación. Hace apenas una semana, Kennedy anunció que las vacunas contra el Covid-19 ya no serían recomendadas para niños sanos y mujeres embarazadas, una decisión que también ha sido criticada por profesionales médicos.
El HHS ahora tiene un plazo de dos semanas para nombrar un nuevo panel de expertos antes de la próxima reunión del ACIP, programada para finales de junio en la sede de los CDC en Georgia. La comunidad científica espera con preocupación los próximos pasos, ya que el nuevo comité podría reflejar las posturas de Kennedy, quien ha cuestionado públicamente la seguridad de ciertas vacunas.
Esta acción ha reavivado el debate sobre la influencia de la política en la ciencia. Mientras algunos sectores aplauden la medida como un intento de revisar el sistema, otros la consideran un retroceso que podría afectar la confianza en las vacunas y la salud pública en Estados Unidos.
La comunidad internacional también observa con atención, ya que las decisiones del CDC suelen tener un impacto global. Por ahora, el futuro de las políticas de vacunación en Estados Unidos permanece incierto, con posibles consecuencias para la prevención de enfermedades en el país y más allá.