La selección italiana de fútbol enfrenta una crisis tras el despido de Luciano Spalletti como entrenador, luego de una devastadora derrota por 3-0 ante Noruega en el debut de las eliminatorias rumbo al Mundial 2026. La Federación Italiana de Fútbol tomó la decisión de cesar al técnico, quien no logró revertir la mala racha de la Azzurra.
El partido contra Noruega, disputado en Oslo, expuso las debilidades del equipo italiano, que no pudo contener el ataque liderado por Erling Haaland. La prensa italiana y los aficionados criticaron duramente el desempeño, señalando la falta de estrategia y cohesión en el campo. Spalletti, conocido por su éxito en el Napoli, no logró replicar esos resultados con la selección.
En una conferencia de prensa, Spalletti anunció su salida, revelando que la decisión fue comunicada por el presidente de la Federación, Gabriele Gravina. El técnico expresó su decepción, afirmando que no tenía intención de renunciar y que hubiera preferido continuar para corregir el rumbo del equipo.
El despido de Spalletti marca el fin de un ciclo de 23 partidos, con un balance de 11 victorias, 6 empates y 6 derrotas. Su etapa incluyó una decepcionante participación en la Eurocopa 2024, donde Italia cayó en octavos de final tras un mal torneo, lo que ya había generado dudas sobre su continuidad.
El próximo encuentro contra Moldavia será el último de Spalletti al frente de la selección. Italia necesita una victoria contundente para mantener vivas sus esperanzas de clasificar al Mundial, una cita a la que no asiste desde 2014, tras ausencias consecutivas en Rusia 2018 y Qatar 2022.
La Federación Italiana ya busca un reemplazo para Spalletti, con nombres como Claudio Ranieri y Stefano Pioli entre los candidatos. Ranieri, quien recientemente tuvo un exitoso paso por la Roma, es visto como una opción sólida para liderar un nuevo proyecto.
La derrota ante Noruega no solo complicó la clasificación de Italia, sino que reavivó el trauma de los aficionados, quienes temen un tercer fracaso mundialista consecutivo. La presión recae ahora en la dirigencia para elegir un técnico capaz de devolver a la Azzurra a la élite del fútbol.
Este cambio llega en un momento crítico, con Italia en el fondo de su grupo eliminatorio y Noruega liderando con puntaje perfecto. La selección deberá reaccionar rápidamente si quiere evitar otro capítulo de decepciones en su historia futbolística.