La ciudad de Juárez vive momentos de tensión tras un nuevo episodio de violencia que las autoridades atribuyen a un enfrentamiento entre los grupos delictivos La Línea y Los Cabrera. Este viernes, una cartulina con amenazas fue abandonada en la calle 12 de Octubre, en el Distrito Poniente, dejando en claro que la disputa por el control del narcomenudeo está lejos de terminar.
El mensaje, escrito en una cartulina verde, advertía sobre una “limpia” contra quienes participen en la venta y consumo de cristal. Según un comandante de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal, el texto apuntaba directamente a varias personas, acusándolas de ser “ratas” y amenazándolas con represalias. La policía municipal acudió al lugar tras el reporte de los vecinos.
El fiscal de la Zona Norte explicó que la violencia reciente en Juárez se debe a una reconfiguración en las actividades delictivas. Con la disminución del tráfico de personas en la frontera, los grupos criminales han regresado al narcomenudeo, intensificando sus disputas por el control de las calles. Esta situación ha generado un aumento en los incidentes violentos en la ciudad.
La mañana del viernes, el hallazgo de la cartulina no fue un hecho aislado. En la colonia Zaragoza, una cabeza humana fue abandonada en una hielera con un mensaje dirigido a Los Cabrera, firmado por el Nuevo Cártel de Juárez. Este macabro incidente refuerza la percepción de inseguridad que viven los habitantes de la frontera.
La disputa entre La Línea, un grupo ligado al Cártel de Juárez, y Los Cabrera, una facción del Cártel de Sinaloa, se centra en el control de territorios clave como el Valle de Juárez y la región de Aldama a Ojinaga. Esta lucha ha dejado un rastro de violencia que incluye homicidios, amenazas y ataques armados en distintos puntos de la ciudad.
La ciudadanía de Juárez, cansada de la violencia, enfrenta el temor constante de salir a las calles. Vecinos de las zonas afectadas han expresado su preocupación por la falta de medidas efectivas para frenar a estos grupos delictivos. El hallazgo de cuerpos y mensajes intimidantes solo incrementa la sensación de desamparo.
Las autoridades locales han intensificado patrullajes y operativos, pero los resultados parecen insuficientes. La presencia de mensajes amenazantes y restos humanos en espacios públicos demuestra que los grupos delictivos actúan con impunidad, desafiando cualquier intento de control.
El gobierno estatal y municipal enfrenta críticas por no lograr contener esta ola de violencia. Mientras los cárteles se disputan el poder, los ciudadanos piden respuestas concretas y acciones que devuelvan la tranquilidad a Juárez.
La situación en la frontera sigue siendo alarmante, con una escalada de violencia que no da tregua. Los enfrentamientos entre La Línea y Los Cabrera no solo afectan a los involucrados en el narcomenudeo, sino que impactan la vida diaria de miles de familias en la ciudad.
Juárez, una vez más, se encuentra en el centro de una lucha criminal que parece no tener fin. Los habitantes esperan que las autoridades actúen con mayor contundencia para recuperar la seguridad en sus calles.