La gimnasta estadounidense Simone Biles, considerada una de las mejores atletas de la historia, desató una controversia al responder a los comentarios de la exnadadora Riley Gaines sobre la participación de atletas transgénero en deportes femeninos. El choque ocurrió en redes sociales tras un comentario de Gaines sobre un equipo de softbol de preparatoria en Minnesota, donde destacó la presencia de una jugadora trans.
Biles, conocida por sus 41 medallas en Juegos Olímpicos y Campeonatos Mundiales, no dudó en calificar a Gaines de “enferma” y “perdedora resentida”. La gimnasta señaló que la campaña de Gaines contra las atletas trans se debe a su derrota en una competencia de natación en 2022, donde empató en quinto lugar con Lia Thomas, una nadadora transgénero.
El comentario de Gaines que desató la polémica se refirió a la victoria del equipo de softbol de Champlin Park en el campeonato estatal de Minnesota. Gaines insinuó que el éxito del equipo se debía a la presencia de una jugadora trans, a quien se refirió con pronombres masculinos, generando críticas por parte de Biles y otros defensores de la inclusión.
En su respuesta, Biles abogó por un enfoque más inclusivo en el deporte. Propuso que, en lugar de atacar a la comunidad trans, se debería trabajar en crear espacios seguros para que estas atletas puedan competir. Incluso sugirió la posibilidad de una categoría transgénero en todos los deportes como una solución para fomentar la equidad.
Por su parte, Gaines defendió su postura, argumentando que los hombres no tienen lugar en los deportes femeninos. La exnadadora, quien ha ganado popularidad en medios conservadores, insistió en que su lucha busca proteger la integridad de las competencias femeninas. Su respuesta incluyó críticas directas a Biles, cuestionando su apoyo a la inclusión trans.
El intercambio entre ambas atletas no pasó desapercibido. Las publicaciones de Biles en redes sociales alcanzaron más de 40 millones de vistas, con miles de usuarios elogiando su defensa de la comunidad trans. Sin embargo, también recibió críticas de sectores conservadores, quienes la acusaron de contradecir los principios de equidad en el deporte.
La controversia se enmarca en un debate más amplio sobre la participación de atletas trans en categorías femeninas, un tema que ha ganado relevancia en Estados Unidos. En febrero de 2025, el presidente Donald Trump firmó una orden ejecutiva que prohíbe a mujeres y niñas trans competir en deportes femeninos, una medida que Gaines celebró públicamente.
Biles, reconocida no solo por su talento sino también por su activismo en temas como la salud mental y los derechos de los sobrevivientes de abuso, ha utilizado su plataforma para promover la inclusión. Su enfrentamiento con Gaines refleja las tensiones actuales en el mundo del deporte sobre cómo equilibrar la equidad y la diversidad.
Gaines, por otro lado, ha construido una carrera como activista conservadora tras su experiencia compitiendo contra Lia Thomas. Sus apariciones en medios de derecha y su apoyo a políticas restrictivas hacia atletas trans han polarizado aún más la discusión.
Este enfrentamiento entre dos figuras prominentes del deporte estadounidense pone en evidencia las divisiones en torno a un tema complejo. Mientras Biles aboga por la inclusión, Gaines insiste en la exclusión de atletas trans en competencias femeninas, dejando el debate abierto sobre el futuro del deporte.