La posible deportación de Jeanette Vizguerra, una conocida activista mexicana por los derechos de los migrantes, quedó en el aire tras una audiencia este viernes en Denver, Estados Unidos. La jueza federal no tomó una decisión definitiva, pero ordenó que Vizguerra permanezca detenida mientras se resuelve su caso.
Vizguerra, de 53 años, fue arrestada el pasado 17 de marzo por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas fuera de su trabajo en una tienda Target en Colorado. Sus abogados presentaron un recurso de habeas corpus, alegando que su detención es ilegal y que viola sus derechos.
Durante la audiencia, la defensa logró que se permita modificar la petición inicial para incluir un nuevo argumento: el ICE habría vulnerado la libertad de expresión de Vizguerra por su activismo. La jueza Nina Wang aceptó esta solicitud y dio plazo hasta el 8 de abril para presentar el documento revisado.
La magistrada también mantuvo una orden previa que prohíbe deportar o trasladar a Vizguerra fuera de Colorado mientras el proceso sigue en curso. Esto da un respiro temporal a la activista, quien lleva años luchando contra su expulsión del país.
Vizguerra llegó a Estados Unidos en 1997 y se convirtió en un símbolo de resistencia al refugiarse en iglesias para evitar ser deportada. En 2017, la revista Time la nombró una de las 100 personas más influyentes del mundo por su labor.
Organizaciones y autoridades locales, como el alcalde de Denver, han criticado su detención, considerándola una represalia por su activismo. Mientras tanto, el ICE defiende que actúa conforme a una orden de deportación válida.
El caso de Vizguerra sigue abierto, con una evaluación pendiente el próximo lunes sobre si tiene un “miedo fundamentado” para no regresar a México. Su futuro en Estados Unidos aún está por definirse.