El líder del Nuevo Partido Democrático (NPD) de Canadá, Jagmeet Singh, ha puesto sobre la mesa una propuesta contundente: impedir que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ingrese al país. Esta iniciativa surge a pocas semanas de la Cumbre del G7, programada para junio en Canadá, un evento que reúne a las principales potencias mundiales.
Singh argumenta que la presencia de Trump representa un riesgo debido a sus políticas y declaraciones controversiales, especialmente en temas como el comercio y la migración. El líder socialdemócrata insiste en que Canadá debe enviar un mensaje claro al mundo sobre sus valores y rechazar la visita del mandatario estadounidense.
La propuesta ha generado debate en el panorama político canadiense. Mientras algunos apoyan la idea como una defensa de la soberanía nacional frente a las tensiones comerciales con Estados Unidos, otros la consideran una medida exagerada que podría dañar las relaciones bilaterales con su vecino del sur.
El gobierno del primer ministro Mark Carney aún no ha tomado una postura oficial. Sin embargo, la presión del NPD podría influir en las decisiones previas al G7, en un contexto donde los aranceles impuestos por Trump han intensificado los roces entre ambos países.
Este movimiento refleja el creciente malestar en Canadá hacia las políticas de Trump, quien ha amenazado con medidas económicas duras si no se cumplen sus demandas. La discusión sobre su entrada promete mantenerse en el centro de la atención pública en las próximas semanas.