El senador Gerardo Fernández Noroña, conocido por su apoyo a Morena, vivió un encuentro inesperado con el expresidente Felipe Calderón en un vuelo rumbo a Campeche. Lo que parecía un viaje rutinario se convirtió en un choque político que no tardó en incendiar las redes sociales.
Fernández Noroña no perdió tiempo y usó su cuenta de X para relatar el momento con un tono mordaz, llamando a Calderón “Tomandante Borolas” y burlándose de su presencia en el avión. Según el legislador, el exmandatario viajaba con su familia y otros panistas, presuntamente rumbo a una boda.
El enfrentamiento no quedó solo en palabras virtuales. Al aterrizar, Luis Felipe Calderón, hijo del expresidente, encaró a Noroña en el aeropuerto. Videos muestran al joven reclamándole al senador por no haber confrontado a su padre cara a cara, mientras este respondía con evasivas.
Noroña, fiel a su estilo, insistió en que no teme decir lo que piensa, pero acusó a Calderón de esconderse tras el incidente. El senador aprovechó para lanzar dardos, diciendo que el PAN y sus figuras “no pierden oportunidad de ponerse persa gratis” en eventos como ese.
La tensión entre ambos bandos no es nueva, pero este episodio pone en evidencia el circo político que sigue rodeando a Morena y sus adversarios. Un vuelo que prometía ser tranquilo terminó como un ring de acusaciones y provocaciones.
Mientras Calderón guardó silencio, las redes se llenaron de críticas y burlas, con Noroña en el centro de la polémica. El incidente, aunque breve, refleja la polarización que sigue marcando la política mexicana.