En un operativo en Apaseo el Alto, Guanajuato, autoridades municipales detuvieron a 11 elementos de la Guardia Nacional presuntamente involucrados en el robo de combustible, conocido como huachicol. El hecho ocurrió la noche del 24 de mayo tras una denuncia anónima que alertó sobre una toma clandestina en la comunidad de El Espejo.
La Policía Municipal acudió al lugar y sorprendió a los elementos de la Guardia Nacional custodiando una pipa conectada a la toma ilegal. Algunas unidades de la Guardia intentaron huir al notar la presencia policial, pero nueve agentes fueron arrestados en el acto. Dos más fueron capturados poco después en la zona.
En el lugar se aseguraron dos patrullas oficiales de la Guardia Nacional, una camioneta particular y un tractocamión con un autotanque, todos presuntamente utilizados para el traslado del combustible robado. Las autoridades también localizaron mangueras y equipo usado para extraer el hidrocarburo de un ducto de Pemex.
Los 11 detenidos fueron puestos a disposición de la Fiscalía General de la República en Guanajuato, donde se inició una carpeta de investigación para esclarecer los hechos. Este caso pone en evidencia la gravedad del problema del huachicol en la región, donde el robo de combustible ha generado violencia y pérdidas económicas.
Guanajuato es uno de los estados más afectados por el huachicoleo, con un aumento constante de tomas clandestinas en los últimos años. En 2024, se registraron 850 tomas ilegales en la entidad, un incremento del 57.99% respecto al año anterior, según datos oficiales.
La participación de elementos de la Guardia Nacional en actividades ilícitas levanta serias dudas sobre la efectividad de las instituciones encargadas de combatir este delito. La ciudadanía y las autoridades locales han expresado su preocupación por la aparente complicidad de fuerzas federales en el crimen organizado.
Este incidente se suma a otros operativos recientes en la entidad, como el aseguramiento de 50 mil litros de hidrocarburo en Villagrán en abril pasado. A pesar de los esfuerzos, el huachicol sigue siendo una fuente de ingresos para grupos criminales, alimentando la inseguridad en Guanajuato.
La detención de estos elementos de la Guardia Nacional pone en el centro del debate la necesidad de fortalecer los mecanismos de supervisión y rendición de cuentas dentro de las corporaciones de seguridad. La confianza en las instituciones está en juego mientras el problema del huachicol persiste en la región.