Este miércoles al mediodía, un violento enfrentamiento armado estalló dentro del Centro Penitenciario de Aguaruto, en Culiacán, Sinaloa, desatando el caos en la zona. Las detonaciones de armas de fuego resonaron desde el interior del penal, alertando a los residentes cercanos y generando una rápida respuesta de las autoridades.
Reportes preliminares indican que el conflicto involucró a grupos rivales de internos, quienes protagonizaron una balacera en al menos tres módulos del reclusorio. Videos difundidos en redes sociales muestran el estruendo de las ráfagas y a custodios disparando desde los edificios del penal, mientras la tensión se apoderaba del lugar.
La Secretaría de Seguridad Pública de Sinaloa confirmó que la situación fue controlada alrededor de las 12:25 horas, pero las autoridades pidieron a la población evitar circular por las inmediaciones del penal. Las vialidades cercanas, incluyendo la carretera Culiacán-Mazatlán, fueron cerradas para garantizar la seguridad y prevenir posibles fugas.
Elementos de la Policía Estatal, Guardia Nacional, Secretaría de Marina y el Ejército Mexicano se desplegaron en la zona, apoyados por dos helicópteros militares que sobrevolaron el penal. La movilización masiva refleja la gravedad del incidente, que mantuvo en vilo a la ciudad.
Medios locales reportaron que los juzgados dentro del penal fueron desalojados tras una hora y media de enfrentamientos. Testigos aseguran haber escuchado al menos cinco detonaciones de explosivos, aunque las autoridades no han confirmado esta información ni han reportado víctimas hasta el momento.
El penal de Aguaruto, conocido por su historial de violencia y fugas masivas, vuelve a ser el centro de atención. En 2019, 51 reos escaparon aprovechando un operativo fallido contra Ovidio Guzmán, hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán, lo que expuso las fallas de seguridad en el reclusorio.
Este nuevo episodio de violencia ocurre días antes de la visita de la presidenta Claudia Sheinbaum a Sinaloa, programada para este fin de semana. La coincidencia ha levantado cuestionamientos sobre la capacidad del gobierno para mantener el control en un estado asediado por el crimen organizado.
La falta de información oficial sobre las causas del enfrentamiento y el número de víctimas mantiene a la población en incertidumbre. Se espera que en las próximas horas las autoridades emitan un comunicado detallando lo sucedido y las medidas que se tomarán para evitar que incidentes como este se repitan.
El penal de Aguaruto, con capacidad para 2,709 internos, ha sido escenario de múltiples operativos recientes. En febrero de 2025, una inspección reveló armas blancas, drogas y celulares, evidenciando la corrupción y la falta de control dentro del centro penitenciario.
Este enfrentamiento armado pone en evidencia, una vez más, la crisis de inseguridad que enfrenta Sinaloa y la incapacidad de las autoridades para garantizar la seguridad en sus prisiones. La población de Culiacán permanece atenta ante cualquier novedad sobre este preocupante incidente.