En un nuevo episodio de inseguridad que sacude al Estado de México, dos ciudadanos colombianos fueron capturados tras cometer un robo de 91 mil pesos en el municipio de Naucalpan. El incidente, que pone en evidencia la creciente ola de delitos en la entidad, ocurrió en una zona residencial y ha generado indignación entre los habitantes.
De acuerdo con las autoridades, los detenidos, identificados como Sebastián “N” y Víctor “N”, irrumpieron en una vivienda en la colonia Lomas de Tecamachalco. Armados y con actitudes violentas, amenazaron a los ocupantes para despojarlos del dinero en efectivo, además de otros objetos de valor. La rápida denuncia de las víctimas permitió a la policía actuar de inmediato.
Elementos de la Secretaría de Seguridad del Estado de México, en coordinación con la Policía Municipal de Naucalpan, desplegaron un operativo en la zona. Gracias a las cámaras de videovigilancia y al seguimiento en tiempo real, los sospechosos fueron localizados mientras intentaban huir en un vehículo. La persecución terminó con su captura en una de las avenidas principales del municipio.
Durante la detención, las autoridades aseguraron el dinero robado, un arma de fuego y el vehículo utilizado para escapar. Los colombianos fueron puestos a disposición del Ministerio Público, donde se determinará su situación jurídica. La Fiscalía General de Justicia del Estado de México ya inició una carpeta de investigación por el delito de robo con violencia.
Este caso se suma a una serie de incidentes similares que han encendido las alarmas en el Estado de México. Vecinos de Naucalpan han expresado su preocupación por el aumento de robos a casa habitación, señalando que la inseguridad parece desbordada. Las críticas a las autoridades locales no se han hecho esperar, pues muchos consideran que las medidas de seguridad son insuficientes.
Fuentes policiales revelaron que los detenidos podrían estar vinculados a una banda delictiva que opera no solo en el Estado de México, sino también en otras entidades como Puebla, Nuevo León y la Ciudad de México. Las investigaciones continúan para determinar si forman parte de una red más amplia dedicada al robo de viviendas.
La detención de estos individuos pone de manifiesto los retos que enfrenta el gobierno estatal en materia de seguridad. A pesar de los operativos y el refuerzo de patrullajes, los delitos patrimoniales siguen afectando a la ciudadanía. Los habitantes exigen respuestas concretas y acciones efectivas para recuperar la tranquilidad en sus comunidades.
Mientras tanto, el caso de Sebastián “N” y Víctor “N” será un punto clave para las autoridades. La presión social para que se esclarezcan estos delitos y se castigue a los responsables es cada vez mayor. La pregunta que resuena en las calles es clara: ¿hasta cuándo se logrará frenar la inseguridad que azota al Estado de México?