El portero mexicano Guillermo Ochoa vive momentos complicados en su aventura europea con el AVS Futebol SAD, equipo de la Primeira Liga de Portugal. A falta de solo dos partidos para que termine la temporada, el club anunció la salida de su tercer entrenador, Rui Ferreira, quien no pudo revertir los malos resultados que tienen al equipo al borde del descenso.
El AVS, con Ochoa como titular en la portería, ha tenido una temporada llena de altibajos. Actualmente, el equipo se encuentra en el último lugar de la tabla con apenas 21 puntos, lo que los coloca en una situación crítica para mantenerse en la primera división portuguesa. La derrota reciente por 1-2 ante el Boavista, entonces colero, agravó la crisis.
Rui Ferreira, quien asumió el cargo en marzo, no logró los resultados esperados. En su breve paso, el equipo solo sumó una victoria en siete partidos, un panorama desolador que llevó a la directiva a tomar la decisión de cesarlo. Ahora, José Mota, un entrenador con experiencia en el futbol portugués, tomará las riendas con la misión casi imposible de salvar al AVS.
Guillermo Ochoa, conocido como “Paco Memo”, ha sido una figura constante en el arco del AVS, pero los resultados no lo han acompañado. En el partido contra Boavista, el mexicano recibió dos goles, uno de ellos en los últimos minutos, lo que sentenció la derrota y dejó al equipo en el fondo de la clasificación. Este sería el cuarto descenso en la carrera europea de Ochoa, tras los sufridos con Ajaccio, Granada y Salernitana.
La llegada de José Mota representa un nuevo comienzo, pero el tiempo juega en contra. Con solo dos jornadas por disputar, el AVS necesita victorias contundentes y una combinación de resultados para evitar caer a la segunda división. La presión recae no solo en el nuevo técnico, sino también en jugadores clave como Ochoa, quien busca cerrar la temporada con dignidad.
El AVS, un club fundado apenas en 2023, logró el ascenso a la Primeira Liga en su primera temporada, pero la inexperiencia y la falta de estabilidad en el banquillo han sido un lastre. Los aficionados, frustrados, exigen resultados inmediatos, mientras el equipo lucha por mantenerse a flote en un torneo altamente competitivo.
Para Ochoa, esta temporada ha sido un desafío personal. A sus 39 años, el guardameta mantiene la ilusión de llegar al Mundial de 2026, pero su desempeño en Portugal será clave para seguir siendo considerado en la Selección Mexicana. Sus actuaciones, aunque destacadas en algunos partidos, no han sido suficientes para evitar los tropiezos del AVS.
El futuro del AVS y de Memo Ochoa en Europa es incierto. Si el descenso se consuma, el portero mexicano podría buscar nuevas opciones, con rumores que lo vinculan a un posible regreso a la Liga MX. Por ahora, el enfoque está en los últimos partidos, donde cada punto es vital para evitar un nuevo capítulo amargo en la carrera de uno de los futbolistas mexicanos más reconocidos.