El gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, soltó una bomba este lunes al afirmar que la Interpol ya emitió una ficha roja contra su antecesor, Silvano Aureoles, y varios de sus excolaboradores. Según él, todos están en la mira por presuntos desvíos millonarios que dejaron en ruinas al estado.
Ramírez Bedolla no se guardó nada y dijo en conferencia de prensa que Aureoles es oficialmente un prófugo de la justicia. Aseguró que la Fiscalía General de la República ya tiene las órdenes de aprehensión listas, y que la Interpol está tras los pasos del exgobernador y su equipo.
El actual mandatario señaló que las investigaciones apuntan a un desfalco brutal durante la gestión de Aureoles. Habló de sobreprecios escandalosos en proyectos como los cuarteles de la Guardia Nacional, donde se habrían pagado casi mil millones de pesos por cada uno, cuando su costo real no pasa de 200 millones.
Además, Ramírez Bedolla destacó que varios exfuncionarios de Aureoles ya están tras las rejas, pero el exgobernador sigue esquivando a la justicia. La ficha roja de la Interpol, dijo, también incluye a otros implicados que habrían huido del país.
Este caso pone en evidencia el desastre financiero que heredó Michoacán, según el gobernador. Acusó a la pasada administración de dejar un “desorden inmenso” en las finanzas públicas, con contratos inflados y recursos federales mal utilizados.
La Interpol ya está en acción, pero la captura de Aureoles y sus cómplices sigue pendiente. Ramírez Bedolla insistió en que no descansará hasta que paguen por el daño causado al estado y sus habitantes.