Un devastador accidente en la Carretera Nacional, en el tramo Allende-Montemorelos, dejó un saldo de dos muertos y varios heridos la noche del sábado. El choque, ocurrido alrededor de las 22:30 horas, involucró a dos automóviles y dos camiones de carga pesada, desatando el caos en una de las vías más transitadas de Nuevo León.
El impacto tuvo lugar en el kilómetro 210, cerca de la comunidad de Congregación Calles. Según los primeros reportes, un vehículo particular intentó rebasar en una zona de alta velocidad, lo que provocó una colisión en cadena con un camión de carga. La maniobra imprudente desencadenó el desastre, atrapando a los ocupantes de los autos en un amasijo de metal.
Las víctimas mortales, un hombre de 35 años y una mujer de 28, viajaban en un automóvil compacto que quedó destrozado tras el impacto. Los cuerpos de emergencia confirmaron su deceso en el lugar. Entre los escombros, los rescatistas encontraron a tres personas más con heridas graves, quienes fueron trasladadas de urgencia a hospitales cercanos.
Al sitio acudieron unidades de Protección Civil de Montemorelos, la Cruz Roja y la Guardia Nacional, quienes trabajaron contrarreloj para rescatar a los sobrevivientes. El escenario era desolador: los vehículos destrozados bloqueaban ambos sentidos de la carretera, mientras los paramédicos luchaban por estabilizar a los heridos en medio de la oscuridad.
La Guardia Nacional acordonó la zona y cerró la Carretera Nacional durante varias horas, generando un congestionamiento que se extendió por kilómetros. Los automovilistas, varados en la vía, fueron testigos de la magnitud del percance mientras las autoridades realizaban las diligencias correspondientes.
Las investigaciones preliminares apuntan a una combinación de exceso de velocidad y maniobras imprudentes como las causas del accidente. Sin embargo, la falta de señalización adecuada y el mal estado de algunos tramos de la carretera también están bajo escrutinio. Vecinos de la zona han denunciado desde hace años la peligrosidad de este tramo, sin que las autoridades tomen medidas concretas.
Este trágico incidente pone en evidencia, una vez más, la creciente inseguridad vial en las carreteras de México. Los accidentes mortales se han convertido en una constante, mientras las autoridades parecen incapaces de implementar estrategias efectivas para prevenirlos. La Carretera Nacional, vital para la economía regional, se ha transformado en un corredor de muerte.
Los heridos permanecen bajo observación médica, y sus familias enfrentan la incertidumbre de su recuperación. Mientras tanto, la comunidad de Montemorelos exige respuestas y acciones inmediatas para evitar que tragedias como esta se repitan. La carretera, ahora despejada, lleva las marcas de un accidente que no debió ocurrir.