En un momento que ha conmovido a muchos, la reina Letizia viajó a Panamá para reunirse con su hija, la princesa Leonor, durante la escala del buque escuela Juan Sebastián de Elcano en la capital panameña. Este encuentro, el primero en casi cuatro meses, tuvo lugar el sábado 3 de mayo de 2025, marcando un hito en la travesía de formación de la heredera al trono español.
El buque escuela, donde la princesa Leonor realiza su instrucción como guardiamarina, atracó en la terminal de Cruceros de Amador en Ciudad de Panamá. La reina, visiblemente emocionada, aguardaba en el puerto mientras el barco llegaba. Al descender, Leonor, vestida con su uniforme blanco, se fundió en un cálido abrazo con su madre, un gesto que reflejó la cercanía entre ambas tras una larga separación.
Este viaje no oficial de la reina Letizia se enmarca en una práctica común entre los familiares de los guardiamarinas, quienes aprovechan las escalas para visitar a los jóvenes en formación. La Casa Real española aclaró que no habrá actos institucionales ni cobertura mediática oficial, subrayando el carácter personal de la visita.
La princesa Leonor, de 19 años, zarpó el 11 de enero desde Cádiz a bordo del Juan Sebastián de Elcano, un bergantín-goleta que lleva casi un siglo formando a oficiales de la Armada española. Desde entonces, ha recorrido puertos como Salvador de Bahía en Brasil, Montevideo en Uruguay, y Valparaíso en Chile, enfrentándose a retos como el cruce del Estrecho de Magallanes.
La escala en Panamá, que se extenderá hasta el 6 de mayo, es la sexta parada internacional del buque en su 96.º crucero de instrucción. Durante estos días, los 76 guardiamarinas, incluidas nueve mujeres, participarán en actividades oficiales, culturales y militares, representando a España y a la Armada.
El comandante del buque, Luis Carreras-Presas do Campo, destacó la relevancia de esta travesía, que incluye el paso por el Canal de Panamá, un hito que el Elcano ha cruzado 47 veces en su historia. Esta ruta, descrita como una de las más emblemáticas, combina desafíos náuticos con la formación integral de los futuros oficiales.
Tras su estancia en Panamá, el buque continuará hacia Cartagena de Indias y Santa Marta en Colombia, seguido de Santo Domingo y Nueva York. La princesa Leonor, sin embargo, interrumpirá su travesía en Estados Unidos para embarcarse en una fragata en España, antes de reincorporarse al Elcano en Gijón en julio.
La visita de la reina Letizia, que permanecerá en Panamá hasta el final de la escala, ofrece a madre e hija la oportunidad de compartir momentos fuera del protocolo. Aunque Leonor debe cumplir con sus deberes a bordo, como realizar guardias o mostrar el buque a visitantes, también podrá disfrutar de tiempo libre con su madre.
Este reencuentro, cargado de simbolismo, resalta el lado humano de la realeza española. La imagen de Letizia y Leonor, abrazándose en el puerto panameño, ha captado la atención de medios internacionales, reflejando el fuerte vínculo familiar en medio de las exigencias de la formación militar.
La travesía del Elcano, que concluirá en Cádiz en julio tras escalas en Gijón y Ferrol, no solo prepara a Leonor para su futuro rol, sino que refuerza la presencia de España en el escenario global, consolidando la diplomacia naval y los lazos culturales con los países visitados.