Una mujer haitiana de 44 años, identificada como Marie Ange Blaise, falleció en un centro de detención migratoria en Florida tras ser arrestada en un aeropuerto de las Islas Vírgenes de Estados Unidos. Su muerte, confirmada el 25 de abril de 2025, ha desatado nuevas críticas contra las condiciones en las instalaciones migratorias del país.
Blaise fue detenida el 12 de febrero en el Aeropuerto Internacional Henry E. Rohlsen, en la isla de Santa Cruz, cuando intentaba abordar un vuelo hacia Charlotte, Carolina del Norte. La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza emitió una orden de deportación acelerada ese mismo día, iniciando su traslado al sistema de detención.
El deceso ocurrió en el Centro de Transición de Broward, en Pompano Beach, Florida, un lugar que ha sido señalado por organizaciones defensoras de derechos humanos. Médicos del centro confirmaron su muerte, pero hasta el momento las autoridades no han revelado la causa oficial, alegando que la investigación está en curso.
Este caso marca el segundo fallecimiento de una persona migrante en centros de detención del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas en 2025. La noticia ha reavivado las denuncias sobre las condiciones inhumanas en estas instalaciones, donde se reportan hacinamiento, falta de atención médica adecuada y tratos degradantes.
Organizaciones de derechos migratorios han exigido transparencia en la investigación. Hasta ahora, no se ha informado si la familia de Blaise ha sido contactada o si se presentarán acciones legales contra las autoridades responsables de su custodia.
El Centro de Transición de Broward, operado por empresas privadas, ha sido criticado previamente por su gestión. Testimonios de exdetenidos describen el lugar como una prisión, con restricciones severas, alimentación deficiente y barreras para acceder a atención médica oportuna.
A finales de marzo, cientos de manifestantes se reunieron frente al Krome North Detention Center, otro centro en Florida, para protestar por la muerte de otro migrante bajo custodia. Las protestas resaltaron la falta de rendición de cuentas y la opacidad en las operaciones de estas instalaciones.
La muerte de Blaise pone en el centro del debate las políticas migratorias de Estados Unidos. Mientras algunos sectores exigen reformas para garantizar el trato humano a las personas detenidas, otros respaldan medidas más estrictas contra la migración irregular.
Las autoridades han señalado que, como en todos los casos de fallecimientos bajo custodia, se realizará un informe detallado. Sin embargo, la falta de información clara sobre las circunstancias de esta tragedia mantiene la incertidumbre y el descontento entre activistas y comunidades migrantes.