Una empresa no regulada prometió a cientos de ahorradores en México rendimientos extraordinarios, pero todo resultó ser un engaño. Con la oferta de hasta un 22% de retorno anual, muchos depositaron sus ahorros confiando en la ilusión de ganancias rápidas y seguras.
El fraude, ejecutado por Grupo Peak, una compañía con sede en Nuevo León, se basó en un esquema piramidal. Los primeros inversionistas recibieron pagos para generar confianza, pero el dinero provenía de nuevos clientes, no de inversiones reales. Así lograron captar más de 800 millones de pesos.
La empresa operaba sin autorización de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, lo que ya era una señal de alerta. A pesar de esto, muchos fueron atraídos por la promesa de beneficios imposibles de sostener en el mercado financiero legal.
En abril de 2024, Grupo Peak anunció su quiebra en una reunión virtual, dejando a los afectados sin respuestas. Algunos intentaron recuperar su dinero, pero solo recibieron amenazas o promesas vacías de pagos en especie, como terrenos.
Este caso expone la vulnerabilidad de los ahorradores ante ofertas engañosas. Expertos señalan que la falta de regulación y supervisión permitió que el fraude creciera sin control durante años.
Las autoridades investigan, pero la recuperación de los fondos parece lejana. Mientras tanto, los damnificados, muchos de los cuales perdieron los ahorros de toda su vida, enfrentan un futuro incierto.