La Secretaría del Bienestar ha puesto en marcha la entrega de la Pensión Mujeres Bienestar correspondiente al bimestre marzo-abril, pero no sin generar dudas y expectativas entre las beneficiarias. Esta semana, del 24 al 27 de marzo, se esperan los últimos depósitos para mujeres de 60 a 64 años, un programa estrella del gobierno de Claudia Sheinbaum que promete apoyo económico, pero que sigue bajo el escrutinio público por su gestión.
El calendario oficial indica que el lunes 24 de marzo recibirán su pago de 3 mil pesos las mujeres cuyos apellidos comiencen con R, S y T. El martes 25 será el turno de las letras U, V y W, mientras que el miércoles 26 se depositará a las de X, Y y Z. Finalmente, el jueves 27 cerrará con rezagados de cualquier letra, un intento de la Secretaría por cubrir a todas las inscritas antes de que termine el mes.
Este programa, que busca “mejorar la autonomía económica” de mujeres adultas mayores, no escapa a la crítica. Aunque se destinan millones de pesos, la organización y los retrasos en la entrega de tarjetas del Banco del Bienestar han sido un dolor de cabeza constante. Muchas beneficiarias aún esperan claridad sobre su situación, mientras el gobierno presume avances en la cobertura social.
En el Estado de México, la dispersión sigue el mismo esquema nacional, pero las quejas no cesan. Las mexiquenses de 63 y 64 años, inscritas desde octubre de 2024, son las primeras en recibir este apoyo, aunque en comunidades indígenas y afromexicanas el rango se amplía de 60 a 64 años. Sin embargo, la falta de comunicación oficial sigue siendo una sombra sobre la iniciativa.
La Pensión Mujeres Bienestar se paga de lunes a viernes, dejando fuera los fines de semana, una decisión que ha complicado la planificación de muchas familias. Con este ritmo, el gobierno federal busca cumplir su meta de atender a un millón de mujeres en 2025, pero la pregunta sigue en el aire: ¿realmente está llegando el apoyo a quienes más lo necesitan?