El Senado de la República dio un paso atrás y canceló un evento que prometía ser un espacio para el empoderamiento de mujeres emprendedoras. La actividad, llamada Unlocked AIWoman, estaba programada para el 2 de julio y buscaba reunir a líderes de América Latina. Sin embargo, la decisión de suspenderlo no fue por falta de interés, sino por una irregularidad que levantó sospechas.
Los organizadores del evento, vinculados a la Asociación Mexicana de Mujeres Jefas de Empresa, intentaron pasar desapercibidos con un detalle crucial: planeaban cobrar 1,200 pesos por entrada. Este cobro, según el senador morenista Cuauhtémoc Ochoa, iba en contra de las normas del Senado, ya que el recinto es un espacio público donde no se permiten actividades comerciales de este tipo.
El evento había sido promocionado como una oportunidad para fomentar el liderazgo y la innovación entre mujeres. Sin embargo, la revelación del cobro no autorizado puso en entredicho las verdaderas intenciones de los organizadores. El Senado, alertado por esta situación, decidió actuar de inmediato para evitar un mal uso de sus instalaciones.
Gerardo Fernández Noroña, presidente del Senado, ya había advertido meses atrás que vigilaría de cerca los eventos realizados en el recinto. Esta no es la primera vez que un evento genera controversia. En febrero, Noroña ordenó suspender actividades de organizaciones sociales tras descubrir que un abogado ligado al narcotraficante Ismael “El Mayo” Zambada participó en una de ellas.
El senador Ochoa fue claro al señalar que los organizadores de Unlocked AIWoman aseguraron que el evento sería gratuito. La promesa de un espacio sin costo para el empoderamiento digital de las mujeres contrastó con la realidad: el cobro de entradas era un hecho que no se había transparentado. Esta contradicción llevó a la cancelación inmediata.
La decisión del Senado refleja un intento por mantener la integridad del recinto como un espacio público. Según las declaraciones de los legisladores, el cobro de entradas no solo violaba las reglas, sino que también generaba dudas sobre la transparencia de los organizadores y su compromiso con el objetivo del evento.
Este caso pone en el centro del debate la supervisión de las actividades que se realizan en espacios oficiales. La cancelación de Unlocked AIWoman se suma a una serie de medidas que buscan evitar que el Senado sea utilizado para fines que no correspondan a su función pública.
El incidente también destaca las tensiones entre los discursos de apoyo al empoderamiento femenino y las prácticas que, en este caso, parecen haber priorizado un interés económico. Las mujeres emprendedoras que esperaban participar en el evento se quedaron sin esta oportunidad, mientras que el Senado refuerza su postura de control sobre lo que ocurre dentro de sus muros.
La cancelación ha generado críticas hacia los organizadores, quienes no han emitido un pronunciamiento oficial sobre el tema. Por ahora, el Senado mantiene su decisión de no permitir eventos que incumplan con las normativas establecidas, dejando en el aire la posibilidad de que iniciativas similares puedan realizarse en el futuro bajo un esquema más transparente.