La noche del 15 de junio de 2025, el grupo musical Los Junior’s de Monterrey vivió un episodio que marcó sus vidas. Tras presentarse en el bar La Kaprishosa, los cinco músicos y su chofer desaparecieron mientras se dirigían a un evento en General Terán, Nuevo León. Lo que parecía una jornada más de trabajo se convirtió en horas de angustia para ellos y sus familias.
La última pista del grupo fue una historia de Instagram publicada por Óscar Ulises Pérez Garza, bajoquintista, alrededor de las 3:00 de la madrugada del 16 de junio. En el video, se veía la camioneta Suburban blanca en la que viajaban, varada en la carretera libre a China, cerca de San Juan, Cadereyta. Con un tono sarcástico, Óscar mencionaba “problemas técnicos”, sin imaginar lo que vendría después.
Los teléfonos de los integrantes se apagaron poco después de esa publicación. Familiares y amigos, preocupados, iniciaron una campaña en redes sociales para dar con su paradero. La Fiscalía de Nuevo León emitió fichas de búsqueda, mientras la incertidumbre crecía en la comunidad musical del noreste del país.
El martes 17 de junio, el gobernador Samuel García anunció que los músicos habían sido localizados con vida. Sin embargo, versiones extraoficiales señalan que los jóvenes fueron agredidos durante su desaparición. La noticia, aunque trajo alivio, dejó preguntas sin respuesta sobre lo ocurrido en esas horas críticas.
Francisco Alfaro, acordeonista suplente de 18 años, fue uno de los primeros en reaccionar. En una historia de Instagram, compartió una foto del amanecer y escribió: “Vivimos para contarla”. Su mensaje fue un reflejo del alivio y el impacto emocional que el grupo aún procesaba.
Leonardo Rubio, baterista de 33 años, también expresó su gratitud en redes sociales. “Gracias a Dios ya estamos bien, sanos y salvos, solo el susto. Muchas gracias por sus oraciones hacia mí”, escribió. Sus palabras resonaron entre los seguidores que habían seguido de cerca el caso.
Luis Nefaki Domínguez, de 23 años, compartió un texto similar: “Gracias por las oraciones y el apoyo de nuestras familias, amigos y otros grupos. Mañana será otro día”. mensaje destacó la solidaridad que recibieron durante la búsqueda, especialmente en redes sociales.
La desaparición de Los Junior’s no es un caso aislado. Semanas antes, el Grupo Fugitivo en Tamaulipas enfrentó una situación similar, lo que ha encendido las alertas sobre la inseguridad que enfrentan los músicos en el norte del país. La falta de información oficial sobre los responsables de este incidente agrava la preocupación.
La camioneta en la que viajaban, con placas de Guerrero, fue encontrada, pero las autoridades no han aclarado las circunstancias del caso. La Fiscalía Especializada en Búsqueda de Personas Desaparecidas continúa investigando, mientras los músicos intentan retomar sus vidas tras el traumático episodio.
Este incidente pone en evidencia, una vez más, los retos de seguridad en Nuevo León. Los Junior’s de Monterrey, una agrupación popular en la escena norteña, regresaron a sus hogares, pero la experiencia deja una huella imborrable y un recordatorio de la violencia que acecha en las carreteras del país.