El Gobierno del Estado de Chihuahua ha destinado más de 50 millones de pesos para bacheo y mantenimiento en la carretera Chihuahua-Ciudad Juárez. Este anuncio llega en medio de críticas por el deterioro de esta vía, que conecta dos de las ciudades más importantes del estado.
La Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas detalló que la carretera tiene una jurisdicción mixta. Esto significa que tanto el gobierno estatal como el federal comparten responsabilidades. Los tramos estatales incluyen Chihuahua-Sacramento y Sueco-Ahumada, sumando 118 kilómetros que reciben mantenimiento constante.
Por otro lado, los tramos federales, que abarcan Sacramento-Sueco y Ahumada-Juárez, suman 232 kilómetros. Estos están bajo la responsabilidad de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes del gobierno federal. Sin embargo, el estado decidió intervenir en estas zonas ante el evidente deterioro.
La inversión busca atender baches y realizar rehabilitación preventiva en tramos clave. Las autoridades estatales aseguran que estas acciones son parte de un compromiso con la seguridad de los chihuahuenses, aunque no han escapado de señalamientos por la tardanza en actuar.
La carretera Chihuahua-Ciudad Juárez es vital para el comercio y la movilidad en el estado. Los conductores han reportado durante meses problemas como baches profundos y tramos en mal estado, que representan riesgos para la seguridad vial.
El gobierno estatal destacó que esta inversión se realiza en coordinación con la Secretaría de Infraestructura federal. Sin embargo, algunos cuestionan por qué el estado tuvo que intervenir en tramos que no son de su responsabilidad directa.
Críticas aside, las obras ya están en marcha. Se espera que los trabajos mejoren las condiciones de la carretera, aunque los ciudadanos exigen resultados visibles y duraderos, no solo soluciones temporales.
La situación de las carreteras en Chihuahua sigue siendo un tema sensible. Mientras el gobierno estatal presume esta inversión, la presión ciudadana no disminuye para que las autoridades, tanto estatales como federales, cumplan con su obligación de mantener las vías en buen estado.
Este esfuerzo de bacheo podría aliviar los problemas en la carretera, pero el debate sobre la eficiencia y la transparencia en el uso de estos recursos continúa. Los chihuahuenses esperan que los 50 millones se traduzcan en caminos más seguros y no solo en promesas.