Un grave caso sacude a Irapuato, Guanajuato. Nicolás, maestro de carpintería en el Centro de Desarrollo Comunitario (Cedecom) de la colonia 24 de Abril, fue detenido por la Policía Municipal tras ser acusado de acosar sexualmente a una menor de cinco años. Los hechos ocurrieron el pasado jueves 12 de junio, minutos antes de las 5 de la tarde, en los baños del centro social.
Según los primeros reportes, dos niños que se dirigían a los sanitarios presenciaron el momento en que el instructor, presuntamente, obligaba a la menor a realizar actos indebidos. Los menores alertaron de inmediato a sus padres, quienes acudieron al lugar y evitaron que el abuso continuara. La rápida reacción de los presentes permitió retener al acusado, quien negó los hechos.
El Gobierno de Irapuato confirmó que la Secretaría de Seguridad Ciudadana atendió el reporte ciudadano y detuvo al sospechoso, quien fue puesto a disposición de la Fiscalía General del Estado. Las autoridades locales activaron el protocolo Círculo Violeta para brindar atención psicológica, jurídica y acompañamiento a la menor y su familia a través del Centro de Atención Integral a Víctimas.
La Fiscalía de Guanajuato ya inició una investigación formal por el delito de acoso sexual. Aunque no se han proporcionado más detalles debido a que las indagatorias están en curso, la denuncia penal presentada marca el inicio de un proceso que busca esclarecer los hechos y garantizar justicia.
La alcaldesa de Irapuato, Lorena Alfaro García, señaló que el acusado no forma parte de la plantilla oficial del gobierno municipal, sino que impartía talleres mediante un programa de empleo temporal. Aseguró que los Cedecom son espacios seguros para la niñez y adolescencia, destacando la pronta acción de la coordinadora del centro para detectar la situación.
Este caso ha generado indignación entre la comunidad de Irapuato. Vecinos y padres de familia exigen que se refuercen las medidas de seguridad en los centros comunitarios, donde niños y jóvenes acuden a actividades educativas y recreativas. La confianza en estos espacios, destinados al desarrollo social, se ha visto afectada.
Las autoridades municipales han reiterado su compromiso con la protección de los menores. Sin embargo, este incidente pone en evidencia la necesidad de revisar los procesos de selección y supervisión de los instructores que trabajan con niños en programas públicos.
El caso sigue bajo investigación, y se espera que la Fiscalía presente avances en los próximos días. La comunidad permanece atenta a las acciones que tomen las autoridades para evitar que situaciones como esta se repitan en el futuro.
La detención de Nicolás ha reavivado el debate sobre la seguridad en los espacios comunitarios. Los padres de familia piden mayor vigilancia y protocolos más estrictos para garantizar la protección de los menores en estos centros.
Este lamentable hecho recuerda la importancia de mantener la atención en la seguridad de los niños. La respuesta de las autoridades y el curso de las investigaciones serán clave para restablecer la confianza en los programas sociales de Irapuato.