Estados Unidos ha tomado una decisión contundente al retirar las visas de entrada al expresidente panameño Martín Torrijos y al político Ricardo Lombana. Ambos, excandidatos a la presidencia de Panamá en las elecciones de 2024, se han destacado por sus críticas abiertas a un polémico acuerdo de seguridad firmado entre el gobierno panameño y la administración de Donald Trump.
Martín Torrijos, quien gobernó Panamá entre 2004 y 2009, anunció en una rueda de prensa que su visa de entrada a Estados Unidos fue cancelada. El exmandatario, hijo del general Omar Torrijos, quien logró la devolución de la soberanía del Canal de Panamá, atribuyó esta medida a su oposición pública al acuerdo de seguridad. Este pacto, firmado entre el presidente panameño José Raúl Mulino y Trump, ha generado controversia en medio de tensiones por las declaraciones del líder estadounidense sobre “recuperar” el Canal.
Por su parte, Ricardo Lombana, quien quedó en segundo y tercer lugar en las últimas elecciones presidenciales de Panamá, también confirmó la revocación de su visa. En un comunicado, expresó que respeta la decisión, pero la considera un intento de silenciar voces críticas. Lombana señaló que el acuerdo compromete la soberanía nacional y la neutralidad del Canal de Panamá, un punto central en su postura.
El acuerdo de seguridad entre Panamá y Estados Unidos incluye un memorando de entendimiento que amplía la presencia militar estadounidense en el país de manera temporal y rotativa. Sin embargo, críticos como Torrijos y Lombana advierten que este pacto podría vulnerar la autonomía panameña, especialmente en un contexto donde Trump ha amenazado con intervenir en el control del Canal de Panamá.
Ambos políticos formaron parte de un grupo de opositores y miembros de la sociedad civil que, el pasado 30 de abril, firmaron una declaración conjunta contra el acuerdo. En este documento, denunciaron que el convenio representa una amenaza a la soberanía y al Tratado de Neutralidad del Canal, un símbolo de la identidad y la independencia de Panamá.
Lombana fue claro al afirmar que esta medida no lo detendrá en su lucha por defender los intereses de su país. En su comunicado, criticó que acciones como la cancelación de visas se utilicen para castigar a quienes cuestionan acuerdos que consideran perjudiciales para la democracia panameña. Su mensaje resalta la importancia de proteger la soberanía en un momento de creciente tensión diplomática.
Torrijos, por su parte, subrayó su legado familiar ligado al Canal de Panamá. Desde la fundación que lleva el nombre de su padre, el exmandatario insistió en que su oposición al acuerdo busca preservar los principios de neutralidad y autonomía que han definido la relación de Panamá con el Canal. Sus palabras reflejan un profundo compromiso con la historia de su país.
La decisión de Estados Unidos de revocar las visas ha generado un debate sobre las implicaciones de este tipo de medidas en la política internacional. Para muchos en Panamá, esto representa un intento de presionar a quienes se oponen a las políticas de Trump, especialmente en un contexto donde las relaciones bilaterales están marcadas por negociaciones comerciales y de seguridad.
La situación pone en el centro de la discusión el delicado equilibrio entre la cooperación internacional y la defensa de la soberanía. Mientras Panamá enfrenta estas tensiones, las voces de Torrijos y Lombana resuenan como un recordatorio de los desafíos que implica mantener la independencia en un escenario global complejo.
Este episodio refleja las crecientes fricciones entre Estados Unidos y algunos líderes latinoamericanos que cuestionan las políticas de la administración Trump. La revocación de las visas no solo afecta a los involucrados, sino que también envía un mensaje a otros actores políticos de la región sobre las consecuencias de desafiar ciertos acuerdos internacionales.