La mañana del lunes 16 de junio, un hombre en situación de calle fue hallado sin vida a un lado de la Avenida Sur en Dolores Hidalgo, Guanajuato. El cuerpo, descubierto por vecinos que pasaban por la zona, yacía en el lugar donde el hombre solía dormir. La escena, marcada por la indiferencia de las autoridades, refleja la dura realidad que enfrentan las personas sin hogar en el municipio.
El reporte inicial llegó al sistema de emergencias gracias a los transeúntes, quienes alertaron sobre el cuerpo inerte. Elementos de Seguridad Pública acudieron al sitio, pero su labor se limitó a confirmar lo evidente: el hombre ya no tenía signos vitales. La falta de una respuesta inmediata por parte de las autoridades locales dejó en el aire preguntas sobre la atención a este sector vulnerable.
El lugar fue acordonado por los policías municipales, quienes aguardaron la llegada de la Fiscalía General del Estado. Los peritos realizaron el levantamiento del cuerpo, que fue trasladado al Servicio Médico Forense en Guanajuato. Allí se llevará a cabo la autopsia de rutina para determinar las causas de la muerte, aunque hasta el momento no se han revelado detalles.
Vecinos de la zona comentaron que el hombre era conocido por dormir en ese mismo sitio, a la intemperie, sin que las autoridades ofrecieran alguna solución. Algunos mencionaron que lo habían visto consumiendo alcohol horas antes de su fallecimiento, lo que pone en evidencia la falta de programas sociales que atiendan a personas en esta condición.
La muerte de este hombre no es un caso aislado. En Dolores Hidalgo, la vulnerabilidad de las personas en situación de calle se agrava por la indiferencia gubernamental. Mientras las autoridades locales no implementen políticas efectivas, estas tragedias seguirán ocurriendo en las sombras de las calles.
La Fiscalía General del Estado no ha proporcionado información sobre la identidad del fallecido. Este anonimato refleja una realidad aún más cruda: muchas personas en situación de calle mueren sin que nadie reclame sus cuerpos o investigue a fondo lo sucedido. La burocracia y la desidia sepultan estos casos en el olvido.
La inseguridad y el abandono social en Guanajuato son problemas que se entrelazan. Aunque este caso no involucra un acto de violencia directa, la falta de atención a los más vulnerables es una forma de negligencia que pone en riesgo vidas. Los ciudadanos de Dolores Hidalgo exigen respuestas y acciones concretas.
Este hallazgo es un recordatorio de la crisis humanitaria que se vive en las calles de México. Mientras las autoridades sigan sin actuar, las personas en situación de calle continuarán enfrentando un destino incierto, olvidadas por un sistema que parece ignorar su existencia.