Una tormenta intensa golpeó el municipio de Manuel Benavides, Chihuahua, la tarde del viernes 13 de junio, con un acumulado de 49 milímetros de lluvia en menos de una hora. El fenómeno desató inundaciones repentinas que anegaron calles y avenidas, afectando viviendas y estructuras como bardas.
La Coordinación Estatal de Protección Civil reportó que las autoridades municipales activaron un operativo de emergencia para evaluar los daños y brindar apoyo a los habitantes afectados. La rapidez e intensidad de la lluvia sorprendieron a la comunidad, generando caos en la localidad.
No solo Manuel Benavides sufrió los embates del clima. Otros municipios como Madera, Temósachic y Guachochi registraron chubascos acompañados de granizo, complicando aún más las condiciones en la región serrana de Chihuahua.
El pronóstico meteorológico indica que las lluvias continuarán este sábado en varios municipios, incluyendo Casas Grandes, Ignacio Zaragoza, Buenaventura, Namiquipa y Batopilas. Las autoridades alertan sobre la posibilidad de más inundaciones en estas zonas.
La Coordinación Estatal de Protección Civil recomendó a la población extremar precauciones y evitar transitar por áreas inundadas. También se aconseja resguardar pertenencias y proteger estructuras ante la posible caída de granizo.
Para quienes conducen, las autoridades sugieren disminuir la velocidad y mantener las luces encendidas en caso de lluvia o granizo. Estas medidas buscan garantizar la seguridad en un contexto climático adverso.
Las temperaturas máximas previstas para este sábado en Chihuahua incluyen 38 grados en la capital, 40 en Juárez y hasta 43 en Chínipas. Estas condiciones cálidas contrastan con las lluvias intensas, complicando la situación.
La Coordinación Estatal de Protección Civil enfatizó la importancia de mantenerse informado a través de fuentes oficiales. La población debe estar atenta a las actualizaciones para evitar riesgos mayores.
El impacto de estas lluvias resalta la vulnerabilidad de ciertas regiones ante fenómenos climáticos extremos. Las autoridades locales continúan trabajando para mitigar las afectaciones y apoyar a las comunidades perjudicadas.
Este evento meteorológico pone en evidencia la necesidad de mejorar la infraestructura urbana para enfrentar lluvias intensas. La respuesta rápida de las autoridades es crucial, pero la prevención sigue siendo un desafío.