Una nueva amenaza climática se cierne sobre México. La onda tropical número 3, combinada con una zona de baja presión con potencial ciclónico, traerá lluvias intensas a varias regiones del país este lunes 16 de junio de 2025, según el Servicio Meteorológico Nacional. Los estados del sureste serán los más afectados, con precipitaciones que podrían causar estragos.
Oaxaca, Chiapas y el sur de Veracruz enfrentarán lluvias puntuales intensas, con acumulados de entre 75 y 150 milímetros. Estas condiciones representan un riesgo significativo, ya que podrían generar inundaciones, deslaves y el incremento en los niveles de ríos y arroyos. Las autoridades han advertido sobre la posibilidad de encharcamientos en zonas urbanas.
En Tabasco, Campeche y Quintana Roo se esperan lluvias muy fuertes, mientras que Yucatán registrará chubascos. Las descargas eléctricas y rachas de viento de hasta 70 kilómetros por hora acompañarán estas precipitaciones, lo que aumenta el peligro para la población. La onda tropical avanzará lentamente por el sureste, prolongando las condiciones adversas.
En el Pacífico centro, Michoacán y Guerrero también sufrirán lluvias intensas, exacerbadas por canales de baja presión y la humedad proveniente del océano. Estas regiones, ya vulnerables por su geografía, podrían enfrentar deslizamientos de tierra e inundaciones en zonas bajas, según los pronósticos meteorológicos.
En contraste, el norte del país no escapará de las condiciones extremas. Baja California, Sonora y Chihuahua alcanzarán temperaturas superiores a 45 grados Celsius, manteniendo una onda de calor que agrava la situación en estas zonas áridas. Las autoridades han alertado sobre el riesgo de deshidratación y golpes de calor.
Sinaloa, Nayarit, Jalisco y Colima también registrarán lluvias fuertes, acompañadas de oleaje elevado en sus costas. Las rachas de viento de hasta 60 kilómetros por hora podrían derribar árboles y anuncios publicitarios, complicando aún más la situación en estas regiones.
El Valle de México no quedará exento de las lluvias. Se pronostican precipitaciones fuertes a muy fuertes, con posibilidad de granizo y tormentas eléctricas. La Ciudad de México y el Estado de México podrían enfrentar encharcamientos, lo que afectará la movilidad urbana.
A pesar de las advertencias, la respuesta de las autoridades sigue siendo un punto de preocupación. La población debe estar alerta y tomar precauciones ante el impacto de esta onda tropical, que promete dejar a su paso un rastro de caos en gran parte del territorio nacional.
El Servicio Meteorológico Nacional mantiene en vigilancia los sistemas meteorológicos y ha instado a la población a seguir las actualizaciones. Las próximas horas serán cruciales para evaluar el alcance de los daños que este fenómeno pueda ocasionar.