En un giro dramático del conflicto en Medio Oriente, Israel lanzó este domingo una serie de bombardeos a gran escala contra objetivos estratégicos en Teherán, la capital de Irán. La operación, que comenzó en la madrugada del viernes, tuvo como blanco infraestructuras clave de la Fuerza Quds, la Guardia Revolucionaria y el ejército iraní, además de centros de producción de armas en varias regiones del país.
El ejército israelí confirmó que sus ataques se centraron en instalaciones militares, incluyendo almacenes de misiles balísticos y sistemas de defensa aérea. También se reportaron bombardeos contra plantas nucleares en Natanz, Isfahán y Furdu, lo que intensifica las preocupaciones sobre el programa nuclear iraní. Según las autoridades israelíes, estas acciones buscan frenar los avances de Irán en la fabricación de armas nucleares y misiles de largo alcance.
La Fuerza Aérea Israelí y la Armada han estado activas desde el inicio de la operación, interceptando más de 100 drones iraníes dirigidos hacia Israel. Hasta el momento, no se han reportado caídas de estos vehículos aéreos en territorio israelí. Sin embargo, los ataques han generado una respuesta contundente por parte de Irán, que lanzó misiles contra ciudades israelíes como Jerusalén y Tel Aviv.
Irán reportó al menos 224 muertos y más de mil heridos como consecuencia de los bombardeos israelíes, incluyendo civiles en zonas residenciales de Teherán. Entre las víctimas se encuentran altos mandos militares, como el jefe de inteligencia de la Guardia Revolucionaria, Mohamad Kazemi, y su adjunto, Hasán Mohaqeq, además de varios científicos nucleares. Estos ataques han sido calificados por el gobierno iraní como una “declaración de guerra”.
Por su parte, Israel asegura que los bombardeos son una respuesta directa a la amenaza que representa el programa nuclear iraní y su apoyo a grupos armados en la región, como Hezbolá y los hutíes. El primer ministro Benjamin Netanyahu afirmó que los ataques buscan “controlar los cielos de Teherán” y neutralizar la capacidad militar de Irán, que considera una amenaza existencial.
En el lado israelí, los misiles lanzados por Irán han dejado al menos 13 muertos y decenas de heridos, según el servicio de emergencias Magen David Adom. Las sirenas antiaéreas han resonado en varias ciudades, y la población ha sido instada a refugiarse mientras las defensas aéreas trabajan para interceptar proyectiles.
La comunidad internacional observa con preocupación esta escalada, que ha elevado los precios del petróleo en un 9% debido a temores sobre interrupciones en el suministro global. Estados Unidos, aunque mantiene comunicación con Israel, ha negado cualquier participación en los ataques y ha rechazado propuestas para intensificar las acciones contra el liderazgo político iraní.
El presidente iraní, Masud Pezeshkian, llamó a la unidad nacional frente a lo que describió como una agresión sin precedentes. Mientras tanto, la Guardia Revolucionaria iraní prometió continuar sus ataques con misiles hasta “la destrucción” de Israel, utilizando nuevos métodos que, según ellos, burlan los sistemas de defensa israelíes.
Este intercambio de ataques marca un nuevo capítulo en la histórica rivalidad entre Israel e Irán, que lleva décadas alimentada por disputas sobre el programa nuclear iraní y el apoyo de Teherán a milicias en la región. Las tensiones, que se han intensificado desde el inicio de la guerra entre Israel y Hamás en 2023, no muestran signos de disminuir.
A medida que el conflicto continúa, el mundo permanece atento a las posibles repercusiones de esta escalada, tanto en la región como en el escenario global. La situación sigue siendo volátil, con ambos países en máxima alerta y sin un horizonte claro para una desescalada.

Imagen generada por IA con fines informativos o representativos. Digital Plural se deslinda de cualquier uso o interpretación.
Israel intensifica su ofensiva contra Irán con ataques masivos en Teherán
Compartir: