Ildefonso Guajardo, exsecretario de Economía durante el gobierno de Enrique Peña Nieto, lanzó duras críticas contra el presidente Andrés Manuel López Obrador, acusándolo de haber consolidado un “club de millonarios” en lugar de cumplir con las promesas de transformación que promovió desde su campaña. En una entrevista reciente, el político priista señaló que las políticas de la actual administración han beneficiado a un grupo selecto de empresarios cercanos al poder, mientras que los problemas estructurales del país persisten sin solución.
El exfuncionario destacó que, lejos de combatir la desigualdad, las decisiones económicas de López Obrador han generado una concentración de beneficios en manos de unos pocos. Guajardo cuestionó la efectividad de los programas insignia del gobierno, como los apoyos sociales, argumentando que no han logrado un impacto significativo en la reducción de la pobreza ni en el fortalecimiento de la economía nacional. Según él, los recursos se han utilizado más para fines políticos que para un desarrollo integral.
Durante la entrevista, Guajardo también criticó la gestión de la política energética, asegurando que las decisiones tomadas han debilitado la competitividad del país. Hizo énfasis en el manejo de Pemex y la CFE, afirmando que la falta de inversión y la prioridad dada a proyectos como la refinería Dos Bocas han generado pérdidas millonarias, sin resultados claros para la población. Para el exsecretario, estas acciones reflejan una visión cortoplacista que beneficia a ciertos grupos de poder.
El priista no escatimó en señalar lo que considera una contradicción en el discurso de López Obrador. Mientras el presidente se presenta como defensor de los más necesitados, Guajardo sostiene que sus políticas han favorecido a empresarios allegados al gobierno, quienes han obtenido contratos y beneficios en proyectos clave. Este señalamiento pone en tela de juicio la narrativa de austeridad y lucha contra la corrupción que ha promovido Morena.
Otro punto que abordó Guajardo fue el manejo de las relaciones comerciales internacionales, especialmente con Estados Unidos y Canadá en el marco del T-MEC. Según él, la falta de claridad en las políticas energéticas y comerciales ha generado tensiones con los socios comerciales, poniendo en riesgo la estabilidad económica del país. Estas críticas refuerzan su argumento de que el gobierno carece de una estrategia sólida para posicionar a México en el escenario global.
Guajardo también se refirió a la polarización política impulsada desde Palacio Nacional, afirmando que el discurso de confrontación ha dividido a la sociedad en lugar de fomentar la unidad. Para el exsecretario, esta estrategia ha servido para desviar la atención de los problemas reales, como el estancamiento económico y el aumento de la inseguridad, que siguen afectando a millones de mexicanos.
El exfuncionario recordó su experiencia como negociador del T-MEC, destacando que México necesita liderazgos con visión global y capacidad técnica para enfrentar los retos actuales. En contraste, acusó al gobierno de Morena de actuar con improvisación y de priorizar intereses políticos sobre el bienestar de la población. Estas declaraciones han generado reacciones encontradas, con algunos sectores apoyando su crítica y otros defendiendo los logros del gobierno.
Las palabras de Guajardo se suman a las voces de oposición que han cuestionado la gestión de López Obrador a lo largo de su sexenio. A medida que se acercan las elecciones de 2024, este tipo de señalamientos intensifican el debate sobre el rumbo del país y el legado de la llamada Cuarta Transformación.