La convocatoria está dirigida a todos los ciudadanos, incluyendo a quienes viven en el extranjero, así como a organizaciones de la sociedad civil. El objetivo es claro: supervisar cada etapa de la consulta, desde la presentación de proyectos hasta la ejecución de los ganadores, para asegurar un proceso limpio y confiable.
Quienes deseen participar como observadores deberán asistir a un curso de capacitación. Este puede realizarse en las 33 Direcciones Distritales del Instituto Electoral de la Ciudad de México, en sus oficinas centrales o a través de un aula virtual diseñada específicamente para este fin.
Durante la capacitación, los interesados conocerán a fondo las etapas de la consulta, las responsabilidades de los observadores y las limitaciones que deben respetar. Entre estas, destaca la prohibición de interferir en las mesas de votación o hacer proselitismo a favor o en contra de algún proyecto.
Los observadores tendrán un papel clave: presenciar todas las fases del proceso, supervisar consultas extraordinarias y presentar informes detallados al Instituto Electoral. Además, podrán integrarse a la Red de Observación, una iniciativa que fortalece la vigilancia ciudadana.
El periodo para solicitar la acreditación como observador comenzó el 15 de enero y se extenderá hasta el 4 de agosto de 2025. Los interesados pueden realizar el trámite de manera presencial o en línea, a través del sitio web oficial del Instituto.
La Consulta de Presupuesto Participativo 2025 permitirá a los habitantes de la Ciudad de México decidir cómo se invertirá el 4 por ciento del presupuesto de las alcaldías. Este mecanismo busca mejorar las comunidades con proyectos de obras, servicios, infraestructura o actividades culturales.
Para los 56 pueblos originarios de la capital, el Instituto ha implementado medidas específicas. La convocatoria se difundirá en lenguas indígenas y a través de diversos canales, garantizando inclusión y respeto a sus tradiciones y sistemas normativos.
Este ejercicio de democracia participativa también incorpora innovaciones tecnológicas. Los ciudadanos podrán votar de manera presencial o digital, utilizando una aplicación móvil o dispositivos electrónicos del Instituto, facilitando la participación de personas en prisión preventiva o en estado de postración.
La transparencia y la participación ciudadana son los pilares de esta consulta. Con la apertura a observadores, el Instituto Electoral de la Ciudad de México busca reforzar la confianza en un proceso que definirá el futuro de las comunidades capitalinas.