El futuro del Club Celaya sigue en el aire, pero hay esperanza para los aficionados. El alcalde Juan Miguel Ramírez Sánchez reveló que cuatro grupos de empresarios están interesados en adquirir la franquicia y mantener el fútbol profesional en la ciudad. La posible mudanza a Veracruz ha generado incertidumbre, pero estas propuestas podrían cambiar el panorama.
Los rumores sobre la venta del equipo a inversionistas veracruzanos han circulado en redes sociales desde hace semanas. Sin embargo, la directiva del Club Celaya no ha confirmado nada oficialmente. Mientras tanto, el municipio espera una decisión clara para negociar el comodato del Estadio Miguel Alemán Valdés, vigente hasta 2030.
Entre los interesados están empresarios de Oaxaca, un grupo de Dolores Hidalgo con inversionistas locales, los Lobos de la Universidad Latina y un cuarto grupo no identificado. Cada uno busca traer una franquicia de Segunda División a Celaya. El alcalde aseguró que no se tomarán decisiones hasta que se confirme si el club se queda o se va.
El comodato actual, firmado en 2015, incluye cláusulas que obligan al club a compartir ingresos por boletos después de los 5,000 asistentes. Ramírez Sánchez señaló que el equipo adeuda millones de pesos al municipio por incumplir este acuerdo. Además, hay problemas con la infraestructura del estadio, como el sistema hidráulico, que el gobierno local tendrá que reparar.
El alcalde ya se reunió con la familia Achar, dueños originales del club, para discutir el futuro. Aunque la Federación Mexicana de Fútbol aún reconoce a los Achar como propietarios, otros socios administran el equipo. Esta confusión complica las negociaciones, pero el municipio insiste en llegar a un acuerdo justo.
Ramírez Sánchez destacó que, si el Club Celaya se va, el gobierno no se quedará de brazos cruzados. Planea impulsar un equipo propio con talento local, buscando jugadores en colonias y comunidades. La meta es formar un equipo competitivo que represente a Celaya en la Segunda División.
La gobernadora Libia García Muñoz Ledo también se pronunció sobre el tema. Confirmó que la Comisión del Deporte del Estado dialogó con los directivos del club, pero aclaró que no se destinarán recursos públicos para retener al equipo. El fútbol, dijo, es clave para el tejido social, pero las decisiones recaen en los dueños y el municipio.
La asamblea de la Liga de Expansión MX, programada para el 19 de junio, será decisiva. Ahí se votará si se aprueba el cambio de sede a Veracruz. Para que ocurra, se necesita el 80% de los votos de los socios. Los aficionados celayenses esperan que los empresarios locales logren mantener al equipo en casa.
Por ahora, el Club Celaya sigue apoyando proyectos municipales, como el Torneo Interbarrios. Sin embargo, los rumores de mudanza han dejado un mal sabor de boca entre los seguidores, quienes han vivido años de pasión con los Toros. La ciudad aguarda una resolución que preserve su identidad futbolística.
El desenlace está cerca, y Celaya podría conservar su plaza en el fútbol profesional. Los empresarios interesados representan una luz de esperanza, pero todo depende de las negociaciones en los próximos días. La afición, mientras tanto, se mantiene atenta a cada movimiento.