El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aseguró que pronto se alcanzará un acuerdo de paz entre Irán e Israel, dos naciones inmersas en un conflicto que ha escalado en los últimos días. En un mensaje publicado en su red social Truth Social, el mandatario afirmó que su administración está trabajando intensamente para poner fin a las hostilidades en Medio Oriente.
Según Trump, se están llevando a cabo numerosas reuniones y conversaciones telefónicas para lograr un entendimiento entre ambos países. El presidente destacó que su enfoque se basa en utilizar el comercio con Estados Unidos como una herramienta para fomentar la razón y la cohesión en las negociaciones, una estrategia que, según él, ya ha funcionado en otros conflictos internacionales.
El conflicto entre Irán e Israel se intensificó tras una ofensiva aérea masiva lanzada por Israel contra instalaciones nucleares iraníes, en respuesta a los avances de Teherán en su programa nuclear. Este intercambio de ataques, que ha dejado más de 150 víctimas según reportes internacionales, ha puesto al mundo en alerta ante el riesgo de una escalada mayor.
Trump se atribuyó un papel central como mediador, comparando la situación actual con acuerdos previos que, según él, logró durante su primer mandato. Mencionó los casos de India y Pakistán, así como Serbia y Kosovo, donde asegura que su intervención evitó conflictos mayores. Sin embargo, estas afirmaciones han generado debate, ya que no todos los tratados mencionados se atribuyen exclusivamente a su gestión.
En su mensaje, el presidente también criticó duramente a su predecesor, Joe Biden, calificando sus decisiones en política exterior como “estúpidas” y asegurando que han complicado las perspectivas de paz en la región. Trump prometió corregir estos errores y llevar estabilidad a Medio Oriente.
Por su parte, el ministro de Exteriores iraní, Abás Araqchí, acusó a Estados Unidos de apoyar los ataques israelíes, afirmando que existen pruebas sólidas de la participación estadounidense. Estas declaraciones han generado tensiones en las negociaciones nucleares que Washington y Teherán mantenían hasta antes de los recientes bombardeos.
Mientras tanto, Israel ha intensificado sus operaciones militares, con su ministro de Exteriores, Gideon Saar, asegurando que aún quedan objetivos clave por cumplir en Irán. La población en ambos países vive momentos de incertidumbre, con refugios abiertos en Teherán y alertas constantes en Israel debido a los ataques con misiles.
Trump también hizo referencia a su intervención en otros conflictos, como la disputa entre Egipto y Etiopía por el río Nilo, donde afirmó haber logrado una paz temporal. El presidente cerró su mensaje con un llamado a hacer que Medio Oriente “vuelva a ser grande”, utilizando una variación de su conocido lema de campaña.
A pesar de las afirmaciones optimistas de Trump, las negociaciones enfrentan obstáculos significativos. La negativa de Irán a suspender su enriquecimiento de uranio y la postura de Israel, liderada por Benjamin Netanyahu, que desconfía de soluciones diplomáticas, complican el panorama.
La comunidad internacional observa con atención los próximos pasos, mientras Trump insiste en que un acuerdo está cerca. Sin embargo, la escalada de violencia reciente y las acusaciones cruzadas entre las partes involucradas mantienen la incertidumbre sobre si la paz es realmente alcanzable en el corto plazo.