En la madrugada del sábado, la tranquilidad de la Placita del Campestre, en la exclusiva zona dorada de León, Guanajuato, se vio brutalmente interrumpida. Un conductor fue ejecutado a balazos en el estacionamiento de esta popular plaza comercial, un lugar frecuentado por familias y comensales. El crimen, perpetrado con una frialdad escalofriante, dejó consternados a los testigos que presenciaron la escena.
El ataque ocurrió alrededor de la 1:30 de la mañana, cuando el conductor de un Nissan Versa gris intentaba refugiarse en el estacionamiento de la plaza, ubicada en el bulevar Manuel J. Clouthier, esquina con el libramiento Morelos. Según testigos, el hombre era perseguido por otro vehículo, desde el cual los sicarios abrieron fuego sin piedad. Al menos cuatro disparos alcanzaron a la víctima, quien quedó sin vida dentro de su automóvil.
La Placita del Campestre, conocida por sus puestos de tacos y su ambiente familiar, se convirtió en escenario de un crimen que refleja la creciente ola de violencia en la ciudad. Los comensales que se encontraban en el lugar, disfrutando de la noche, fueron testigos de cómo los agresores dispararon sin contemplaciones antes de huir a toda velocidad con rumbo a la salida hacia Lagos de Moreno.
A pesar de los reportes al número de emergencias, los sicarios lograron escapar sin ser detenidos. Minutos después, elementos de la Policía Municipal acudieron al lugar, donde encontraron el vehículo y al conductor recostado en los asientos, ya sin signos vitales. La escena, marcada por los impactos de bala, evidenció la brutalidad del ataque.
Este asesinato se suma a una serie de incidentes violentos que han sacudido a León en los últimos meses, incrementando la percepción de inseguridad entre los ciudadanos. La falta de resultados concretos por parte de las autoridades para frenar estas agresiones armadas genera cada vez más preocupación en la población.
Paramédicos de Protección Civil llegaron al lugar para confirmar el fallecimiento de la víctima, mientras los policías acordonaron la zona para preservar la escena del crimen. Sin embargo, la rapidez con la que los agresores huyeron dejó pocas pistas inmediatas para las autoridades, que ahora enfrentan la presión de esclarecer este nuevo caso.
La Fiscalía General del Estado ha iniciado las investigaciones correspondientes, pero hasta el momento no se han revelado avances significativos. La identidad del conductor asesinado no ha sido confirmada oficialmente, lo que añade incertidumbre a un caso que ya de por sí ha generado indignación entre los habitantes de la zona dorada.
Este tipo de ataques, ejecutados con precisión y en lugares concurridos, pone en evidencia los retos que enfrentan las autoridades locales para garantizar la seguridad. Los residentes de León exigen respuestas y acciones contundentes ante una violencia que parece no dar tregua, afectando incluso los espacios que antes se consideraban seguros.