La noche del jueves en Ciudad Juárez se tiñó de sangre con una ola de violencia que dejó cinco hombres asesinados en menos de tres horas. Los hechos, ocurridos en cuatro eventos distintos, han encendido las alarmas sobre la inseguridad que azota la ciudad.
El primer crimen se registró a las 20:57 horas en la colonia La Cuesta. Octavio Casas Vera, de 48 años, fue atacado a balazos frente a su casa por dos hombres armados. Los disparos impactaron en su rostro, y su madre, de 78 años, lo identificó en la escena, sufriendo una crisis emocional que requirió atención de paramédicos.
Apenas media hora después, a las 21:27 horas, otro hombre fue ejecutado en el estacionamiento de un centro comercial en la avenida Waterfill y Río Bravo. La víctima, que se encontraba en su camioneta Dodge Ram roja, fue atacada por dos sicarios, uno con un fusil de asalto y otro con una pistola calibre 9 milímetros. Los disparos alcanzaron su cabeza y brazo izquierdo.
El tercer incidente ocurrió en el fraccionamiento Hacienda de las Torres Universidad, a las 22:37 horas. Dos jóvenes, Naim Malagón Palomares, de 19 años, y Daniel Rubio, de 21, fueron baleados mientras conversaban afuera de una casa. Un pistolero les disparó en la cabeza, pecho y costado derecho.
Los dos jóvenes fueron trasladados por familiares al hospital 66 del Seguro Social en camionetas particulares. Sin embargo, debido a la gravedad de sus heridas, ambos fallecieron al llegar al área de urgencias.
Con estos cinco asesinatos, la cifra de homicidios en Ciudad Juárez durante junio asciende a 40, según el conteo oficial de la Fiscalía General del Estado. La violencia en la ciudad no da tregua, y los hechos de esta noche reflejan la gravedad del problema.
Los cuerpos de las víctimas fueron trasladados por el Servicio Médico Forense para realizar las autopsias correspondientes. Las autoridades ministeriales acudieron a cada escena para recabar evidencia, pero no se han reportado detenciones relacionadas con estos crímenes.
La ola de violencia en Juárez pone en evidencia la falta de control sobre la inseguridad en la región. Los ciudadanos enfrentan un clima de temor constante, mientras las autoridades parecen incapaces de frenar la escalada de asesinatos.
Esta noche violenta es un recordatorio de los retos que enfrenta Ciudad Juárez en materia de seguridad. Los hechos, ocurridos en un lapso tan breve, han generado indignación y preocupación entre los habitantes de la ciudad.
La pregunta que queda en el aire es cuánto tiempo más deberá soportar Juárez esta realidad. Los asesinatos continúan sumándose, y la tranquilidad parece cada vez más lejana para los juarenses.