Un hombre originario de Veracruz, identificado como miembro del Nuevo Cártel de Juárez (NCDJ), fue capturado en el municipio de Madera, Chihuahua, con una cantidad considerable de cocaína. La detención ocurrió en la carretera que conecta El Largo Maderal con La Mesa del Huracán, un área conocida por ser un corredor de actividades ilícitas.
El sujeto, identificado como Andrés R. M., de 20 años, viajaba acompañado de otro individuo, Benjamín R. H., de 34 años, originario de Janos, Chihuahua. Ambos fueron interceptados por agentes estatales mientras se desplazaban en una camioneta Jeep Grand Cherokee, modelo 1999, que resultó tener reporte de robo.
La captura se dio tras una persecución iniciada cuando los ocupantes de la camioneta intentaron huir al notar la presencia policial. Los agentes lograron detener el vehículo y, al realizar una inspección, encontraron 66 porciones de cocaína, con un peso aproximado de 60 gramos, y 49 porciones de marihuana, con un peso cercano a los 956 gramos.
El hallazgo de las drogas confirma la actividad del NCDJ en la región, un grupo criminal que ha estado vinculado a diversos actos de violencia y narcotráfico en Chihuahua. La detención de estos dos individuos representa un nuevo capítulo en la lucha contra el crimen organizado en el estado, donde las autoridades enfrentan retos constantes.
La camioneta robada, utilizada para transportar las sustancias ilícitas, pone en evidencia las tácticas de estos grupos, que no solo se dedican al tráfico de drogas, sino también a otros delitos como el robo de vehículos. Este incidente resalta la complejidad de las operaciones criminales en la zona.
Las autoridades estatales han intensificado los operativos en áreas como Madera, donde la presencia de cárteles ha generado un aumento en la inseguridad. Sin embargo, la persistencia de estas actividades delictivas pone en duda la efectividad de las estrategias implementadas para combatir el crimen organizado.
Los detenidos fueron puestos a disposición de las autoridades correspondientes, quienes determinarán su situación legal. Mientras tanto, la incautación de las drogas y el vehículo robado se suma a los esfuerzos por desmantelar las redes del NCDJ, aunque el camino para recuperar la seguridad en la región parece aún largo.
Este caso pone de manifiesto los desafíos que enfrentan las fuerzas del orden en Chihuahua, donde la presencia de grupos como el NCDJ continúa afectando la tranquilidad de las comunidades. La detención de estos dos sujetos es solo una pieza más en un rompecabezas mucho mayor.