En Cuauhtémoc, Chihuahua, se ha instalado el Consejo de Promoción de Turismo, Negocios y Deportivo, un nuevo organismo que promete impulsar el desarrollo local. La ceremonia de toma de protesta fue encabezada por el alcalde Beto Pérez, quien asumió el cargo de presidente del consejo. Sin embargo, la creación de este organismo descentralizado genera dudas sobre su verdadera utilidad y el manejo de los recursos municipales.
El consejo estará a cargo de administrar tres instalaciones clave: la Arena de Rodeo, el Centro de Convenciones y la Pista de Arrancones. Según las autoridades, su misión es promover el turismo, los negocios y el deporte en la región. Pero, en un municipio donde las necesidades básicas de muchos ciudadanos aún no están cubiertas, ¿es esta la prioridad que Cuauhtémoc necesita?
El organismo será liderado por Virgilio Casale Pérez como gerente y secretario técnico. Entre los vocales se encuentran figuras como Paty Ramírez, tesorera municipal, Luly Mendoza, síndica, y Verónica Escalante, directora de Fomento Económico. También participarán representantes de la iniciativa privada, como Alejandrina Villar de Canacintra, Nicandro Coronado de Canaco y Susana Heide de Coparmex, además de Jaime Nájera como voz de la sociedad civil.
La integración de funcionarios municipales en el consejo levanta sospechas sobre su independencia. Con el alcalde al frente y varios de sus colaboradores en cargos clave, hay quienes cuestionan si este organismo será un espacio para decisiones autónomas o simplemente una extensión del gobierno local. La transparencia en su operación será crucial para disipar estas dudas.
El consejo operará como un organismo descentralizado del gobierno municipal, lo que le otorga cierta autonomía administrativa. Sin embargo, esta estructura también implica que dependerá de recursos públicos para su funcionamiento. En un contexto de austeridad, la ciudadanía espera que los fondos destinados a este consejo se justifiquen con resultados tangibles y no se conviertan en un gasto innecesario.
Entre las promesas del nuevo organismo está el mantenimiento y la promoción de las instalaciones deportivas y de eventos. La Arena de Rodeo y el Centro de Convenciones son espacios con potencial para atraer visitantes, pero su impacto real dependerá de una gestión eficiente. La Pista de Arrancones, por su parte, es un proyecto que genera opiniones divididas entre los habitantes.
La participación de la iniciativa privada en el consejo es un punto a favor, ya que podría aportar experiencia y recursos adicionales. Sin embargo, la presencia mayoritaria de funcionarios municipales podría limitar la influencia de los empresarios. El equilibrio entre el sector público y privado será fundamental para que el consejo cumpla con sus objetivos.
Cuauhtémoc enfrenta retos importantes en materia de desarrollo económico y social. La creación de este consejo podría ser una oportunidad para posicionar al municipio como un destino atractivo, pero también corre el riesgo de convertirse en una estructura burocrática más. Los ciudadanos estarán atentos a los resultados de esta nueva apuesta del gobierno local.
La administración de Beto Pérez ha puesto énfasis en proyectos de promoción turística y deportiva, pero la efectividad de estas iniciativas aún está por verse. En un municipio con carencias en infraestructura y servicios, la ciudadanía espera que este consejo no sea solo una fachada para justificar gastos, sino un motor real de desarrollo.
Por ahora, el Consejo de Promoción de Turismo, Negocios y Deportivo inicia su camino en medio de expectativas y escepticismo. El tiempo dirá si esta decisión del gobierno municipal fue un acierto o un paso más en la creación de organismos que poco aportan a la comunidad.